El Aston Martin AMR23 ha nacido de la mejor forma posible. El equipo, que cuando Alonso firmó tan solo estaba por delante de Williams en el Mundial de constructores, ha logrado un podio en Bahrein gracias a Fernando tan solo ocho meses después de estar casi en el farolillo rojo de la clasificación. Todo, con un coche base.

Con un monoplaza que, como han dicho una y otra vez estos días tanto Fernando Alonso como Mike Krack, es solo el comienzo. Y, para ser solo el comienzo, lo cierto es que tiene más que enamorado al piloto asturiano.

A uno que ha pasado de ver más que complicados los podios y prácticamente imposibles las victorias a reconocer que, tras un cajón en la primera prueba, hay otras 22 para seguir soñando.El coche funciona, y lo dejó claro tanto por sus radios como por sus maniobras ante Lewis HamiltonyCarlos Sainz.

Hay quien lo ve ya de manera asidua en el podio, como es el caso de Max Verstappen, y la duda estriba en qué habría pasado de no haber perdido la posición con los Mercedes en la primera vuelta de Sakhir y de, incluso, haber adelantado a los Ferrari. La 'Scuderia', degradación máxima.

Ahora, para seguir con un suflé ya bien cocinado y con una más que buena forma, ha hablado el dueño de Aston Martin F1. El que está detrás de todo. El gran nombre. El número 1. Sí, porque Lawrence Stroll ya ha avisado.

"Esto es solo la primera fase de nuestro coche. Ya solo va a ir mejor y mejor", afirma Stroll.

Sí, va en consonancia con lo que Alonso dijo tras la clasificación. Un Alonso que sabe cosas, cosas que también sabe el dueño de la escudería de Fórmula 1. Una que está en boca de todos.