Fernando Alonso ha vuelto. Su debut con Aston Martinno ha defraudado y, una década después, el asturiano abre de nuevo la temporada subiendo al podio en el Gran Premio de Bahrein, pero su travesía hacia el tercer cajón no ha sido un camino de rosas.

Tras caer hasta la séptima posición en la salida por un toque de su compañero Lance Stroll, Fernando ha remontado aprovechando el abandono de Charles Leclerc y superando a los Mercedes de George Russell y Lewis Hamilton para ponerse en la estela de Carlos Sainz.

Los dos pilotos españoles se han batido en un duelo memorable por el podio en el que Alonso se ha cocinado el adelantamiento a fuego lento. El ovetense ha estado a rebufo de Sainz durante tres giros, hasta que en la vuelta 45 ha conseguido superarle en la recta trasera abriendo el DRS.

Tras completar el adelantamiento, Alonso ha liberado la tensión de la batalla soltando por la radio una frase más que contundente que se hizo viral.

"¡Sí, bye bye!", afirmó una vez superada la batalla el bicampeón del mundo.

Después, ha puesto tierra de por medio abriendo una brecha de más de nueve segundos al piloto de Ferrari.

"Dije que no haríamos ningún podio en 2023, pero..."

Al concluir la carrera, Alonso se ha mostrado emocionado, lanzándose en brazos de sus mecánicos nada más salir del coche, y es que el asturiano asegura que este podio era inesperado: "Dije que no haríamos ningún podio en 2023, pero todo se ha adelantado", ha declarado a 'DAZN'.