El VAR volvió a ser protagonista en el partido del Real Madrid ante el Granada. Por diferentes cuestiones. Dos tarjetas rojas que no señaló ni el videoarbitraje ni el árbitro del encuentro, Gil Manzano.

Todo empezó en la primera mitad, con una entrada de Machis sobre el canterano Marvin por detrás en la que el futbolista del Granada ni vio amarilla. El videoarbitraje no avisó a Gil Manzano para que revisara la acción.

El canterano, de hecho, se tuvo que quedar en el vestuario durante el tiempo de descanso, lesionado en esa acción, según informó el periodista José Luis Sánchez en 'El Chiringuito'. Álvaro Odriozola, goleador en la segunda parte, salió en su lugar.

Pero hubo más. Para rematar la noche, una entrada criminal de Domingos Quina sobre Eden Hazard se quedó solo en amarilla. De nuevo desde la sala vor nadie avisó al colegiado, que determinó que esa entrada tampoco era tarjeta roja.

El Real Madrid se llevó la victoria en Granada y mantiene viva la lucha por LaLiga. Luka Modric, Rodrygo Goes, Álvaro Odriozola y Karim Benzema fueron los goleadores. Jorge Molina, que a sus 39 años sigue de dulce, anotó el solitario gol de los locales.