Ha pasado un mes desde que Eva Amaral se quitó la camiseta en pleno concierto y cantó a pecho descubierto ante los más de 35.000 asistentes del festival Sonorama Ribera. La artista, que celebraba junto a Juan Aguirre los 25 años del grupo que ambos componen, quiso llevar a cabo este gesto para reivindicar la libertad de las mujeres, especialmente tras el incidente de su compañera de profesión Rocío Saíz con un policía, que interrumpió su recital después de que ella cantara en 'topless' sobre el escenario.

"Que subiera un policía a detener su concierto y que recibiera todos esos comentarios fue determinante. Me dio la sensación de que se sentía sola en esa lucha suya y que el mundo de la música no estaba reaccionando con ella. Poner un tuit no era suficiente", ha afirmado la vocalista de Amaral en una entrevista en 'Hora 25', de la Cadena Ser.

Desde entonces, la cantante ha tenido que surfear olas de críticas y alabanzas, pero, afirma con rotundidad, lo volvería a hacer. "No me arrepiento", le ha asegurado a Aimar Bretos. "No me quiero hacer la víctima, pero es increíble que una persona, por ser libre en un momento determinado de su vida, por hacer tan poca cosa como salir al escenario con el torso desnudo, reciba esto", se ha quejado. "Toda la montaña de odio que he recibido me da la razón", ha añadido.

La experiencia fue para ella "la liberación más grande" que ha sentido jamás. Tanto Juan como Eva han recordado que chicos y chicas de las primeras filas también se quitaron las camisetas en señal de apoyo. "Fue precioso. Algunos incluso lloraban. Por algo será, ¿no? ¿No nos da que pensar que hay algo ahí que tiene que avanzar más todavía?", se ha preguntado.

"No me parece que sea un acto de provocación que un hombre se quite la camiseta. ¿Por qué tiene que serlo que me la quite yo?"