A partir del miércoles, la mascarilla dejará de ser obligatoria en espacios interiores, salvo en centros sanitarios y en transportes. Ante este escenario, el doctor César Carballo ha mandado un "aviso a navegantes".

A través de su cuenta de Twitter, el urgenciólogo explica el caso que podría darse en aquellos trabajos en los que se obligue a no llevar la mascarilla a los empleados. "Si hay alguna presión en este sentido, que se atengan a consecuencias", comenta.

Y es que, según afirma Carballo, si alguien se infecta de coronavirus en el trabajo, algo "fácil de demostrar", se obliga a no llevar la mascarilla en interiores y la infección es severa, "prepárense para una buena demanda que seguramente gane".

Para Carballo, el mensaje lanzado por el Ministerio de Sanidad de "proteger a los más vulnerables" es "ridículo", aportando dos razones. La primera es que los casos diarios "no son una medida fiable" porque asegura que "infraestiman la transmisión". En caso de haber un aumento de casos, Carballo afirma que a las autoridades "les da igual si no hay un colapso total del sistema".

"Yo ahora mismo, si trabajo en interiores, no me quitaría la mascarilla, y no pueden obligarme a hacerlo", responde a un usuario de la red social.