La Real Academia de las Ciencias Sueca reconoce con el galardón el trabajo de los tres químicos que han ayudado con su obra al avance de la nanotecnología, al afán científico por desarrollar "las máquinas más pequeñas". Su objetivo era "construir máquinas con las dimensiones de la escala nanométrica" -siendo el nanómetro la millonésima parte del milímetro-, emulando a elementos de la naturaleza como el flagelo de una bacteria o las macromoléculas con forma de sacacorchos que avanzan al girar.
Sauvage aportó en este campo la técnica de reunir moléculas en torno a un ión de cobre, formando los menores elementos de construcción de máquinas posibles. Fraser Stoddart se centró en la formación de moléculas de formas muy concretas que pudiesen encajar unas con otras y, por tanto, transmitir movimiento. Y Feringa lideró la investigación que diseñó y sintetizó una molécula que giraba en una dirección concreta, lo que supuso el primer motor molecular, explicó la academia.
Así consiguieron los elementos clave para conformar las máquinas moleculares (elementos mínimos, relacionados unos con otros y capaces de moverse y transmitir el movimiento), lanzando la carrera de la nanotecnología. La academia sueca se mostró convencida de que, gracias al trabajo de los tres galardonados, el futuro traerá más "acontecimientos emocionantes" en el campo de la nanotecnología que se basan en los descubrimientos de estos químicos.
Savage nació en París en 1944 y en la actualidad es profesor emérito en Estrasburgo (Francia), mientras que su colega británico nació en Edimburgo en 1942 y es profesor en la Universidad de Northwestern (Illinois, EEUU) y Feringa (Barger-Compascuum, 1951), es profesor de Química Orgánica en Groningen (Holanda). Los galardonados recibirán un diploma, una medalla de oro y un premio económico, que este año será de 8 millones de coronas suecas (832.000 euros).