La investidura de Feijóo no iba a salir adelante, y es algo que se sabía. Mes y medio después, es el turno del otro candidato. Pedro Sánchez ha estado negociando durante varias semanas con las diferentes formaciones para asegurarse los votos necesarios en una eventual investidura que ahora se hace realidad. La ley de amnistía es la propuesta que ha hecho, por un lado, que el socialista pueda contar con más apoyos de cara al proceso en el que se votará si se queda en la Moncloa, pero por el otro, también la que ha sacado a las calles a cientos de personas en varias protestas que se han ido sucediendo en los últimos días frente a la sede del PSOE y en otros puntos.
En este escenario, con un ambiente caldeado como también lo estaba cuando Mariano Rajoy fue investido presidente en 2016 —cuando miles de personas participaron en la manifestación 'Rodea el Congreso', convocada por la Coordinadora 25S—, es en el que se celebra al fin esa investidura que se ha ido retrasando hasta que Sánchez ha conseguido contar con los apoyos necesarios no sólo para ser investido presidente, sino para serlo en primera votación.
La sesión tiene lugar en el Congreso de los Diputados, donde desde ya días atrás se ha desplegado un dispositivo de seguridad, con el fin de evitar problemas en las inmediaciones. Las puertas del Congreso quedan cerradas 24 horas antes de la investidura, con numerosas vallas perimetrando el edificio, y más de 1.300 agentes velarán por la seguridad de un Congreso blindado. Y es así, en estas condiciones, en las que tiene lugar la investidura de Sánchez.
El PSOE pide "serenidad" de cara a la investidura
Precisamente por lo acontecido en las últimas jornadas, Sánchez ha pedido "serenidad" a sus compañeros, al asegurar que el PSOE está "cumpliendo el mandato de las urnas" y ha expresado su "alegría", ya que considera que el proceso de investidura "ha salido bien", después de haber logrado los apoyos de 179 diputados, por encima de la mayoría absoluta del Congreso.
Además, según las mismas fuentes, Sánchez ha subrayado su convicción con los pactos alcanzados con grupos como Junts y ERC, porque ha señalado que el objetivo no es la amnistía, sino lograr un "gobierno de progreso".
Primera parte de la investidura: el debate
Todos los procesos de investidura están estructurados de la misma manera, tal y como prevé el artículo 99 de la Constitución española y los artículos 170, 171 t 172 del Congreso de los Diputados. La sesión de investidura arranca con el debate de investidura, en el que Pedro Sánchez expondrá ante el pleno el programa del gobierno que prevé formar. Su intervención, sin límite de tiempo, sirve también para solicitar la confianza a los diputados.
Después de esto, y tras un "tiempo de interrupción" decretado por Francina Armengol, presidenta de la cámara, toman la palabra los representantes de los diferentes grupos políticos para fijar su posición al respecto. Estos sí lo hacen con un tiempo específico, de no más de 30 minutos, y en un orden concreto —de mayor a menor representación—, que es el siguiente:
- PP
- Vox
- Sumar
- ERC
- Junts
- EH Bildu
- EAJ-PNV
Durante toda la sesión del debate de investidura, Pedro Sánchez puede hacer uso de la palabra las veces que lo solicite. Si opta por contestar de manera individual a cada uno de los representantes políticos, cada uno de ellos tiene derecho a réplica durante un máximo de 10 minutos. Si lo hace de manera global, todos los representantes tienen esos 10 minutos de manera conjunta.
La primera votación de la investidura
Una vez finalizado el debate y todas sus consiguientes réplicas y contrarréplicas, llega el turno de la votación, que tiene lugar a una hora "fijada" por la presidencia del Congreso. La votación es pública y por llamamiento, es decir, se va llamando uno a uno a todos los diputados, por orden alfabético —a partir de un miembro de la cámara elegido al azar—, para que en voz alta respondan con un "sí", "no" o "abstención" al otorgamiento de la confianza. En esta primera votación, para ser investido presidente Pedro Sánchez necesita 176 votos favorables, es decir, mayoría absoluta, algo para lo que ha estado negociando durante semanas.
El PP, que ha participado de las protestas contra la ley de amnistía propuesta para llegar a un acuerdo de investidura, ha estado pidiendo a los diferentes diputados que voten en contra de la investidura esta semana. Los 'populares' han estado llamando al transfuguismo dentro de las filas del PSOE, como ya hicieron en la investidura de Feijóo, pidiendo directamente al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que "plante batalla" a Sánchez. Sin embargo, fuentes del grupo parlamentario socialista y también de la dirección del partido de Castilla-La Mancha ya confirmaron a EFE que todos los diputados del PSOE votarán 'sí'.
¿Quién votará 'sí' a la investidura?
Sólo tres partidos han optado por rechazar de plano la investidura de Sánchez, mientras que el resto de fuerzas políticas se han comprometido a mantener a Sánchez en la Moncloa. En el caso de que todos los diputados que se han comprometido a votar 'sí' a la investidura lo hagan finalmente, estos son los apoyos que tendrá Sánchez en primera votación:
- PSOE: 121
- Sumar: 31
- ERC: 7
- Junts: 7
- EAJ-PNV: 6
- EH Bildu: 5
- Coalición Canaria: 1
- BNG: 1
En total, Pedro Sánchez contaría con 179 votos a favor para la investidura, si bien Cristina Valido ya ha adelantado que el apoyo de Coalición Canaria para formar gobierno no implica apoyar la ley de amnistía. "Es un acuerdo de legislatura, pero no nos vincula con la amnistía, la cual rechazamos. Nos vincula con Canarias, con la estabilidad que necesitan las instituciones", señaló entonces.
Así pues, los tres partidos que previsiblemente votarán en contra son PP (137), Vox (33) y UPN (1), lo que suma un total de 171 votos en contra.
¿Qué pasa si no sale investido ahora?
Si bien las negociaciones de Sánchez iban en esta dirección, en la de conseguir los apoyos suficientes como para ser revalidado presidente en primera votación, de no conseguirlo aún tiene otra oportunidad esta misma semana. En este caso, se celebraría una segunda votación 48 horas después de la anterior, por lo que estaríamos hablando del sábado 18 de noviembre. En esta segunda votación, no obstante, Pedro Sánchez sólo necesitaría tener más 'síes' que 'noes', que es lo que ocurrió en 2020 cuando se firmó el primer Gobierno de coalición de la historia de la democracia española: 167 diputados votaron a favor, 165 en contra y 18 optaron por la abstención.
Antes de esta segunda votación, Sánchez podría realizar otra intervención, de 10 minutos, con una subsecuente respuesta de cinco minutos para cada uno de los representantes parlamentarios.
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Tras la investidura, el anuncio al rey
Una vez que el candidato ha recibido la confianza de la cámara, el siguiente paso es la comunicación al rey. Felipe VI es quien tiene que nombrar al presidente, con el refrendo de, en este caso, Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados. El nombramiento del presidente se publica en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y, posteriormente, ya tiene lugar la toma de posesión de su cargo, ante el monarca.
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