Warner Bros. tiene dos gallinas de los huevos de oro. Una es la deDC y sus superhéroes que, ahora mismo, se encuentra en una fase de remodelación total a cargo de James Gunn. La otra es la de Harry Potter que, entre 2001 y 2011, generó la friolera de 7.700 millones de euros en taquilla. Es cierto que intentaron expandir el universo Potter con 'Animales Fantásticos' pero, si bien, la primera entrega funcionó, las otras dos pincharon hasta el punto de que la propia Warner ha abandonado por completo la idea de seguir con ellas. Pero lo que no quiere bajo ningún concepto es perder la posibilidad de amasar dinero con la saga literaria de J. K. Rowling.

Por eso, ahora mismo están en negociaciones tempranas con la autora para poder sacar a la luz una seriede 7 temporadas que nos vuelva a contar la misma historia que ya vimos en las películas. Un remake de los que tanto gustan en Hollywood pero que de cara al fan y al espectador, a priori, no tiene demasiado interés. El 'Mundo Mágico' ideado por Rowling ha demostrado que tiene los mimbres suficientes como para contar toda clase de historias y no volver sobre lo mismo. Vamos a mostraros algunas de las que se podrían llevar a la pantalla y que no salen de nuestra imaginación. Son historias que ya están ahí y que podrían adaptarse sin problema.

'Hogwarts Legacy', finales del siglo XIX

Empezamos por lo último aunque, paradójicamente, sea la historia más alejada en el tiempo con respecto a los libros y películas originales. Hogwarts Legacy es un videojuego en el que se nos cuenta una historia original nunca vista hasta ahora. Situada temporalmente a finales del siglo XIX, esta historia nos muestra que existe una magia antigua a la que muy pocos magos pueden acceder. Es la misma clase de magia que se utilizó para construir el castillo de Hogwarts muchos siglos atrás. Un tipo de magia que tiene obsesionados a los duendes (los que dirigen el banco de Gringotts) y con la que pretenden iniciar una guerra contra los magos.

En el videojuego encarnamos a un mago que, por raro que parezca, empieza en Hogwarts en 5º curso y que, no os desvelaremos por qué, es capaz de dominar esa magia ancestral. Tirando de este hilo, se podría crear una serie en la que prácticamente, se nos podría contar cualquier cosa porque tiene elementos de sobra para hacer las delicias de los 'potterheads': conspiraciones, magos oscuros, una guerra en ciernes y, por supuesto, el encanto del castillo de Hogwarts y las tierras escocesas.

'Animales fantásticos', principios del siglo XX

No porque su última película ('Los secretos de Dumbledore') fracasase en taquilla significa que el mundo que nos presentó 'Animales Fantásticos' no fuese atractivo. De hecho, la idea de una serie alejada de los muros de Hogwarts que nos muestre cómo funciona el Mundo Mágico de los adultos es tremendamente atractiva. Los distintos ministerios de magia, cómo es la vida de un auror, cómo conviven y se ocultan de los muggles... etc. Hay mil y un detalles que se podrían explotar. Se necesitaría una buena historia y unos personajes que enganchen. Quizá este fue el gran problema de las películas. Newt Scamander y su pandilla no enganchaban, de hecho, eran bastante sosos, aparte de que la historia que nos querían contar no tenía la tensión que requería. Y eso que contaban con Gellert Grindelwald. Un villano que, sí, no era Voldemort pero que podía haber tenido mucho más tirón del que tuvo.

'Harry Potter y el Legado Maldito', 20 años después de los libros

'Harry Potter y el Legado Maldito'

La obra de teatro que todo fan querría ver en una pantalla. J. K. Rowling la escribió directamente para los escenarios pero, con los cambios adecuados y un guion adaptado a la televisión podríamos ver lo que algunos han soñado desde el epílogo de 'Harry Potter y la Reliquias de la Muerte': ¿qué es lo que pasa después?, ¿cómo son los hijos de Harry, Ginny, Ron y Hermione? Lo que cuenta la sinopsis de la propia obra teatral es que Harry ahora es el director del Departamento de Seguridad del Ministerio de Magia y tiene que lidiar con el día a día de su empleo y con sus tres hijos.

Uno de ellos, el más pequeño, Albus Severus (al que ya vimos en el epílogo de la última película) empieza su primer curso en Hogwarts. A partir de aquí vamos viendo como el hijo pequeño de Harry va pasando los cursos y cómo tiene que lidiar con el legado y la marca que dejan ser hijo del mago más famoso de la historia: aquel que derrotó a Quien No Debe Ser Nombrado. Contra todo pronóstico, Albus Severus no hace honor a su apellido y entra en una espiral de la que mejor no os contamos más porque, como estáis viendo, hay material más que de sobra para hacer una grandísima serie. Veremos si Warner se atreve algún día a ello.