Mascotas

¿Qué beneficios tiene para los niños convivir con perros? Víctor Algra los explica en este vídeo

Varios estudios han determinado los beneficios físicos que tiene para los niños convivir con un perro. Por ejemplo, su mascota puede llegar inmunizarles ante algunas enfermedades respiratorias, como asma o algunas alergias. Pero estos beneficios van mucho más allá.

Varios estudios han determinado los beneficios físicos que tiene para los niños convivir con un perro. Por ejemplo, su mascota puede llegar inmunizarles ante algunas enfermedades respiratorias, como asma o algunas alergias. Pero estos beneficios van mucho más allá.

Víctor Algra vuelve a Zapeando para hablar sobre una amistad muy especial: la de los niños con perros. "No me extraña que sean mejores amigos", señala Isabel Forner, "juegan juntos, se dan calorcito... son todo ventajas". Además, como indica, "muchos estudios confirman lo bueno que es para el niño crecer junto a un perro, incluso a nivel físico".

Estos estudios indican que pueden llegar a inmunizarles de algunas enfermedades respiratorias. El veterinario apunta que no es una inmunización como la que haría una vacuna, pero, "sí que reducen la posibilidad de tener algunas patologías respiratorias". Algra, además, señala que algunos estudios determinan que niños que han crecido en granjas que tienen menos incidencias de alergias. A pesar de ello, Algra advierte que sí que existe un riesgo de poner a convivir a niños que presentan síntomas de esas patologías con perros. "Un perro no es una medicina, mucha prudencia con esto", expone.

Los beneficios de convivir con un perro

Pero, más allá de los beneficios físicos, que un niño conviva con un perro también puede tener otros beneficios. Como indica el veterinario, "un vínculo positivo niño-perro, con el acompañamiento adecuado, puede aportarles beneficios".

Por ejemplo, esa unión puede favorecer la autoestima del niño, ya que ese vínculo les hace sentir importantes. Los niños también pueden desarrollar la empatía, "porque observan cómo se sienten sus animales, cuidan de ellos y responden a sus necesidades, y esto les ayuda a reconocer emociones y a conectar con sentimientos que están fuera de ellos".

Los niños también pueden aprender habilidades sociales. "Existe una relación entre tener mascota y el aumento de esas competencias", señala Algra. Por último, les permite aprender a ser responsables ya que, como señala el veterinario, "cuidar a un animal implica seguir una rutina diaria, asumir compromisos y desarrollar cierta autonomía".

*Sigue a laSexta en Google. Toda la actualidad y el mejor contenido aquí.