Los bancos están dando muchos menos créditos de los que daban hasta 2022. El motivo no es otro que que consideran que las condiciones de las personas que acuden a recibir esos créditos no son óptimas para concedérselos con vista a 20 o 30 años.
El experto económico José María Camarero ha asegurado que, por ejemplo, para comprarse un piso de 200.000 euros, tenemos que tener más o menos 70.000 euros guardados en el bolsillo, de los cuales 13.700 euros serán solo en impuestos.
Así, con una hipoteca de 143.000 euros, nos saldría a pagar una cuota de 740 euros. "Nuestra nómina debería ser de al menos 2.200 euros. ¿Qué persona gana en España eso de media netos?", se ha preguntado Camarero.