Aurora Pérez, camarera de piso de profesión, explica la precaria situación en su empresa con las horas extra y denuncia que las hace "a diario" y que "no se pagan", ya que las "camuflan como horas complementarias". En esta ocasión le han pedido que eche dos horas más a su contrato de cuatro horas diarias.
"Pero si por cuatro horas me haces nueve habitaciones, en seis me haces 12, 13 ó 14", afirma que le piden desde su empresa, con lo cual su hora de salida no es "a las seis horas, sino que echa siete u ocho", "las cuales ni registra, ni cotizan". "Esta es la realidad de mi sector", denuncia la camarera de piso Aurora Pérez.