Jordi Évole entrevista al Señor Daw Meskine, imán de la mezquita de la banlieue de Clichy-sous-Bois, durante 25 años para saber si se puede encontrar alguna mezquita por los alrededores pero con carácter radicalizado. El imán es contundente: “No tenemos imanes radicales en esta zona periférica”. Y es que, según explica, “si un imán vive para predicar un discurso integrista, es expulsado del país inmediatamente”.

Daw Meskine asegura que la “radicalización se hace a través de Internet y en las cárceles”, no en las mezquitas. Además, asevera “atrae a los desesperados que no se encuentran en los valores de la República, que son la fraternidad y la igualdad”, aunque no justifica eso que se atente contra una revista como Charlie Hebdo.

Sin embargo, el imán asegura que aunque “es una acción que todos los musulmanes han condenado, no pueden decir que no estaban heridos por el mensaje de la revista”. ”Condeno la agresión que te afecta, pero no puedo compartir tu tesis de reírse de todos los profetas y no decir nada”, concluye.