Las lectoras de Megan Maxwell son las que mejor hablan de sus novelas, por ello Jordi Évole se ha reunido con varias de ellas. Antes de empezar, asegura que les ha costado bastante conseguir a seguidoras de la autora que quisieran dar la cara.

Évole explica que les ha dado la sensación de que "había un punto de vergüenza" por reconocer que leen este tipo de novela erótica. "El género está infravalorado y denostado", explica una de las lectoras.

Las lectoras cuentan una anécdota en la que a Megan le dijeron otros autores que "ella escribía para analfabetas". No obstante, sus lectoras no dudan en defenderla y en recomendarla además aseguran que "se ha creado una comunidad muy grande detrás de ella".

"Debes de estar todo el día cachonda si estas todo el día leyendo porno", explica una de las mujeres que es el tipo de comentario que a veces recibe. A lo que otra contesta que "estar cachonda es una cosa biológica, igual que si tienes hambre". Puedes ver la conversación completa en el vídeo superior de esta noticia.