Editorial

'Las pulseras salvan vidas'

Los datos Aunque ha habido fallos administrativos, más de 21.000 mujeres han usado las pulseras y ninguna ha sido asesinada, demostrando que el sistema funciona y salva vidas.

'Las pulseras salvan vidas'

Que haya habido fallos en el sistema es innegable y reprobable. Es normal que se pidan explicaciones y que se exija que no vuelva a ocurrir. Pero no podemos perder de vista lo más importante: las pulseras antimaltrato salvan vidas.

Desde su implantación en 2009, más de 21.000 mujeres han usado este sistema de protección. Y de todas ellas, ninguna ha sido asesinada. Esto no es un detalle menor: las pulseras funcionan, disuaden a los agresores y permiten que la Policía y la Justicia actúen a tiempo.

El fallo reciente, provocado por un cambio de proveedor y la pérdida temporal de datos, ha generado sobreseimientos y absoluciones de agresores. Sí, es grave, y hay que corregirlo. Pero no significa que las pulseras dejen de proteger. Actualmente, más de 4.500 mujeres en España cuentan con este dispositivo, que sigue salvando vidas cada día.

El sistema es sencillo pero eficaz. La pulsera se coloca en el agresor, envía la ubicación y alerta si se rompe o se manipula. La víctima recibe avisos en su móvil y puede pedir ayuda al instante. Y el Centro Cometa vigila 24/7, coordinando Policía y Justicia si hay riesgo.

España es referente internacional: ningún país ha logrado que tantas mujeres estén protegidas sin que se produzcan asesinatos mientras llevaban el dispositivo. Otros gobiernos han replicado nuestro modelo, y aquí mismo, se ha ido perfeccionando con nuevas aplicaciones y protocolos.

Sí, hay que exigir que los fallos no se repitan. Pero no podemos olvidar que este sistema salva vidas. Que las víctimas de violencia machista lo sepan: hay herramientas que funcionan, y las pulseras son una de ellas.