Ahora señala a Santos Cerdán

Los 'ojos' del juez: así actúa la UCO, el cuerpo de élite que persigue la corrupción en España

El contexto
El informe que señala a Santos Cerdán como receptor de dos coches de la trama Koldo aún no ha llegado al juez, pero ya se considera dinamita judicial. La UCO actúa solo por orden judicial y sus informes rara vez se cuestionan.

Los 'ojos' del juez: así actúa la UCO, el cuerpo de élite que persigue la corrupción en España

El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha salido al paso de las informaciones que le sitúan como receptor de dos vehículos vinculados a la trama Koldo. Según un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, el dirigente socialista habría recibido los coches como parte de una supuesta red de favores y comisiones.

Cerdán, sin embargo, lo desmiente tajantemente: "Es todo surrealista. Tengo un solo coche y está pagado con un préstamo. No he recibido comisiones en ningún formato", ha declarado a laSexto.

Desde el PSOE, la respuesta ha sido de apoyo cerrado. Aseguran que el informe no ha llegado aún al juez y lamentan profundamente el daño reputacional que, denuncian, se está produciendo por una filtración que consideran interesada. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha defendido a su compañero de filas: "Pondría la mano en el fuego por Santos Cerdán. Es una filtración más sin recorrido judicial por ahora".

Según publicó 'Artículo 14', Cerdán lleva meses en el punto de mira de la UCO. Pero, ¿por qué y cómo actúa esta unidad de élite?

Así trabaja la UCO

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil es una de las unidades de élite más respetadas del país. Está especializada en investigaciones complejas de crimen organizado, delitos económicos y corrupción. Depende directamente de la Jefatura de Policía Judicial y, por tanto, sus actuaciones siempre están subordinadas a la autoridad judicial o fiscal.

No actúa por cuenta propia. Cada vez que inicia una investigación, lo hace tras recibir una orden de un juez o del Ministerio Fiscal, generalmente a través de la Fiscalía Anticorrupción. Esta orden puede estar motivada por una denuncia, una querella o un testimonio que apunta a la posible comisión de delitos graves.

A partir de ahí, la UCO despliega una investigación meticulosa: interviene teléfonos, realiza seguimientos, analiza cuentas bancarias, interroga a sospechosos, accede a registros de empresas, y practica entradas y registros domiciliarios o en oficinas.

Durante esos registros puede requisar cualquier objeto que considere útil para esclarecer los hechos: desde documentos hasta electrodomésticos o dispositivos electrónicos. Todo queda detallado, y cada paso requiere el aval de la autoridad judicial.

Uno de los aspectos más importantes es que la UCO no entrega todo lo que recopila. Su equipo selecciona, contrasta y analiza la información y elabora un informe técnico, que recoge únicamente aquellas conclusiones que consideran relevantes para el juez en relación con la causa abierta. No hacen valoraciones políticas ni interpretativas: se centran en los hechos verificables y en las pruebas objetivas.

Su prestigio en los tribunales es muy alto. En la práctica, los jueces confían plenamente en su trabajo, hasta el punto de que sus informes suelen ser el punto de partida para decisiones clave como imputaciones, detenciones o procesamiento. Los jueces rara vez acuden ya personalmente a los registros; delegan esas actuaciones en la UCO, a la que consideran una extensión técnica de su función investigadora.

La unidad está dividida en ocho departamentos especializados, entre ellos uno centrado exclusivamente en delitos económicos y corrupción. Es esta sección la que ha dirigido investigaciones como la trama Púnica, el caso Lezo, Gürtel, los contratos de emergencia durante la pandemia, y ahora, la trama Koldo.

Pero su ámbito no se limita a lo económico. También han resuelto crímenes de enorme repercusión social, como el de las niñas de Alcàsser, el secuestro y asesinato de Diana Quer, el crimen de Gabriel Cruz o el secuestro de la farmacéutica de Olot. Y han conseguido detener a algunos de los delincuentes más escurridizos del país, como el atracador conocido como 'El Solitario' o al mayor ciberestafador español, tras más de un año de investigación digital.

La UCO también trabaja en coordinación con cuerpos internacionales —como Europol o Interpol— y participa en operaciones transnacionales contra el narcotráfico, la trata de personas o el blanqueo de capitales.

Su trabajo es metódico, reservado y lento. Pero cuando entregan un informe, rara vez cae en saco roto.