La campaña del 18 se ha convertido en unas pequeñas elecciones nacionales. La amnistía y la posición del PP ha salpicado toda está última semana. Lo que hace unos meses parecía que el Partido Popular daba por ganado, ahora no tanto.

Todo está listo para que este domingo a las 19:20 horas arranque el especial Al Rojo Vivo: Objetivo Galicia con los datos y resultados con Antonio García Ferreras.

La suerte está echada y, a grandes rasgos, o el PP revalida su mayoría, o pierde la Xunta. Un puñado de votos pueden decidirlo todo. ¿En qué hay que fijarse el domingo? ¿Dónde puede estar la diferencia este 18F?

Hay que tener en cuenta esos últimos escaños que pueden decantar la balanza hacia un lado u otro, sobre todo en dos provincias. En A Coruña hay más en juego, 27 de 75. Allí los socialistas confían en arrebatar ese diputado decisivo al PP. En Pontevedra, Sumar tendría la oportunidad de entrar y disputarse con socialistas y BNG escaños fundamentales para el PP.

Además, en Oursense puede darse la sorpresa. La circunscripción con la que la formación de Jácome, Democracia Ourensana, podría asegurarse su entrada en el Parlamentoy tener la llave para la gobernabilidad de la Xunta.

El voto exterior también puede ser determinante en el resultado final, no sería la primera vez que decidiría unas elecciones gallegas. Medio millón de votantes, casi el 18% podían decantar desde el extranjero el futuro de Galicia, la Comunidad con una de las mayores tasas de voto CERA, sobre todo en Ourense (casi el 30%) y Lugo (21%).

Por tradición, Galicia es la comunidad más abstencionista y el dato se disparó por encima del 50% en las últimas autonómicas, en plena pandemia. De la participación dependerá, sobre todo, un buen resultado de la izquierda.

La mayoría absoluta se encuentra en los 38 escaños

Habrá que estar atento, sobre todo, a tres cifras. La mayoría absoluta está en 38 escaños, el 45% de voto en el que los partidos marcan la continuidad del PP y el 65% de participación en el que pone sus esperanzas la izquierda.

Es clave, sobre todo para el PP, asegurarse la mayoría que le permita gobernar. Los nacionalistas ya lideran la alternativa situándose segundos en todas las encuestas, con los socialistas dando por hecha la coalición de izquierdas. En esta situación, todo puede pasar.