Esta semana se cumplen 80 años del histórico desembarco de los aliados en Normandía, un momento crucial que inició el fin del nazismo en Europa. El 6 de junio de 1944, 160.000 soldados aliados llegaron a las costas de Francia para liberar al continente del yugo nazi. Sin embargo, existe una historia menos conocida, la de los aliados que podrían haber desembarcado en España, específicamente en Galicia, para acabar con la dictadura de Franco.
En plena Segunda Guerra Mundial, el régimen de Franco temía una invasión aliada debido a su apoyo a la Alemania nazi. A pesar de que no hay evidencia concluyente de que los aliados planearan invadir España, el gobierno franquista creyó firmemente en esa posibilidad. Dos informes militares, uno de 1943 estudiado por el historiador Emilio Grandío en sus libros 'War zone' y 'Hora cero' y otro de 1945, detallan las preparaciones para una posible invasión.
Franco confiaba en que el clima gallego, con sus altas probabilidades de lluvia y niebla, dificultaría el uso de aviones y paracaidistas aliados. Además, se planearon medidas defensivas adicionales: crear puestos de observación para detectar aviones, instalar teléfonos en estos puestos para notificar rápidamente cualquier avistamiento, y cambiar o quitar carteles de direcciones para confundir a los invasores.
El informe de 1945 proponía incluso plantar árboles y levantar cercas en los llanos para impedir el aterrizaje de aviones. Además, en los años 1942 y 1943, se desplazaron centenares de soldados a Galicia como medida de precaución, aunque la debilitada capacidad militar del ejército español tras la Guerra Civil hacía que esta medida fuera más simbólica que efectiva. En 1945, se planteó la creación de un somatén, un cuerpo paramilitar de civiles armados preparados para actuar como guerrilla en caso de invasión.
Pero, ¿por qué Galicia? La región no estaba bien protegida y su proximidad a Portugal, aliado de los estadounidenses y británicos, así como a Francia y al Reino Unido por mar, la hacía un punto estratégico plausible para una posible invasión.
Aunque esta invasión nunca se materializó, los preparativos del régimen franquista reflejan el miedo y la paranoia que dominaban la España de la época.
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