"He dicho que voy a derogar el sanchismo, lo voy a hacer", dice Alberto Núñez Feijóo. Para el líder del Partido Popular, "derogar el sanchismo es derogar la forma y el fondo de hacer política en España, todas aquellas leyes que están inspiradas en las minorías y que atentan contra las mayorías".

LaSexta Clave explica qué exactamente "derogar el sanchismo", las leyes que si llegase el PP a gobernar en España revocaría. Para empezar, tener en cuenta que el Parlamento más fraccionado de la historia ha aprobado 213 iniciativas legislativas.

Las primeras con las que acabarían serían las reformas de la malversación y la sedición. Y a partir de ahí, Feijóo también quiere eliminar varias leyes sociales: leyes de educación, la ley trans, la eutanasia o la que tiene que ver con Memoria Democrática.

En cuanto a las leyes educativas que los 'populares' querrían derogar está la conocida como 'ley Celaá', cuyo recurso de inconstitucionalidad presentado por el PP desestimaba hace apenas unas semanas el Alto Tribunal. También cambios en favor de la escuela pública, hacia la descentralización y para limitar las repeticiones de curso.

Entre las leyes históricas que se han aprobado esta legislatura y que el PP revocaría, la de eutanasia, que recoge el derecho a solicitar en determinados casos la "prestación de ayuda para morir".

Y entre las leyes que implican a colectivos hasta ahora olvidados y que el PP también eliminaría, la de la ley trans. El Gobierno cumplía su objetivo, que era dar luz verde a la ley en el Congreso antes de final de año, a pesar de las constantes tensiones en la coalición y el movimiento feminista, a cuenta de la libre autodeterminación de género.

También leyes como la de Memoria Democrática, por la defensa de los valores democráticos y la condena por primera vez de la dictadura franquista.

Además, hay leyes económicas que tampoco gustan a Feijóo, como lareforma de las pensiones, cuyo segundo paquete obtenía el visto bueno del Congreso el pasado mes de marzo sin acuerdo con la patronal y centrado en reforzar los ingresos para garantizar la sostenibilidad del sistema. Salió adelanta casi dos años después de consensuar el primer bloque de la reforma, para revalorizar las pensiones con el IPC.

O la primera Ley de Vivienda de nuestra democracia. Fue uno de los compromisos del pacto de investidura y a la vez el gran escollo interno del Gobierno desde el comienzo del mandato. Por dos diferencias principales: la regulación del precio de los alquileres en las zonas tensionadas y la definición de grandes y pequeños tenedores de viviendas. Llegó a condicionar el apoyo de los morados a los presupuestos en 2021 y 2022, pero acabó siendo la última gran ley en aprobarse días antes de las elecciones.

Este es un breve resumen de lo que supondría "derogar el sanchismo", deshacer todo lo hecho por el gobierno de Pedro Sánchez. ¿Lo hará Feijóo si llega a mudarse a Moncloa en verano o asumirá al menos una parte?

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, desde luego, quiere ir más lejos que su líder nacional: la sedición y la malversación, la "politización de la Justicia", los "pactos con Bildu", los "impuestos a los ricos", el impuesto a la banca, elimpuesto a las eléctricas, la ley de vivienda, la reforma la laboral, la Ley Celaá, laLey de Universidades, la Ley de Ciencia, la Ley de Convivencia Universitaria, la ley de diversidad familiar, la de Memoria Democrática o la Ley de Bienestar Animalalimentan la larga lista de leyes que Ayuso derogaría.