La Guardia Civil comienza en un mercadillo gaditano la investigación de una importante red de distribuidores de falsificaciones. Hay algo que llama la atención de los agentes: siempre se repite la misma imagen. Los manteros de todo el territorio nacional venden la misma mercancía, pero ¿quién les suministra?

“Esta gente tiene demasiado abastecimiento, por lo que no podemos quedarnos en ir a detenerlos e incautarles la mercancía ilícita. Hay que ir a por los cabecillas y a por los distribuidores”, relata un agente.

Ellos son el último eslabón. No es preocupante, pero no estamos hablando de un mantero, sino de miles de manteros. Se calcula que el comercio mundial de falsificaciones mueve entre un 5 y un 7% de la economía, un total de 500.000 millones de euros. La pregunta es ¿quién lo controla?