La aparición de un cadáver calcinado dentro de su propio coche conmocionó a la Guardia Urbana de Barcelona. El nombre de la víctima era Pedro Rodríguez, miembro de dicho cuerpo policial. Tenía 37 años y era padre de un hijo. Lo encontraron en el pantano de Foix, (Barcelona), a solo diez minutos de la casa donde vivíacon su pareja Rosa Peral-también compañera de trabajo-. El crimen parecía la obra de una mafia internacional que no dejó rastro, como reflejó Equipo de Investigación en un programa de 2017 que laSexta ha vuelto a emitir este domingo.

Fernando Sánchez, formador en Emergencias, explicó que a pesar de que un vehículo se incendie siempre hay una parte que permanecerá inalterable: "El número de bastidor no se destruirá, es una cifra única que identifica a todos los vehículos que existen". Según el experto, el lugar "más adecuado" en un coche para la destrucción de pruebas con el fuego "sería el habitáculo de la conducción porque hay más combustible, están los tapizados, los asientos, las alfombras... y se genera más temperatura".

"Para destruir pruebas no es el mejor método, sino el más rápido y fácil de conseguir", expresó Sánchez. Sin embargo, advirtió de que un vehículo calcinado, "al igual que en el incendio de una vivienda, es un libro abierto para los investigadores". "Siempre quedaría algún resto orgánico que los especialistas pueden analizar", aseguró, como puede observarse en el vídeo superior.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2017 que laSexta ha vuelto a emitir este domingo.