En nuestros hogares tiramos más de dos millones de toneladas de alimentos en buen estado a la basura. ¿Cómo es posible? Más de la cuarta parte del carro de la compra acaba en el cubo de la basura

¿Qué ocurre ahí dentro? Lo que se hace, de entrada, es dirigir los pasos del cliente. Vamos por donde quieren que vayamos. Cuando un cliente va a comprar pan, antes tiene que pasar por hogar, belleza y bebidas. Un camino de tentaciones hasta llegar a la zona más apartada del supermercado.

Más detalles. En los supermercados no existen referencias temporales. Lo que sí hay son luces con truco. La carne roja es más roja, como si estuviera recién cortada. La fruta y la verdura brillan tanto que parecen de cera. Perfectas.

Pero la estrategia estrella, la que llena los carros de comida que se va a tirar son las ofertas. Ellos lo intentan. Pero son los consumidores los que tienen la última palabra. Y todo apunta a que sí, nos gusta comprar más de lo que necesitamos.

Lo comprobamos en el lugar donde más comida se desperdicia de toda España, curiosamente la comunidad con más paro: Andalucía, donde cada ciudadano tira 300 € de comida. En total, los consumidores estaríamos tirando 11.000 millones de euros a la basura cada año.