La Guardia Civil descubrió que Ana María, de 63 años, enviaba hasta 150 sobres diarios desde un pueblo de Granada que contenían nuevas drogas de diseño a múltiples puntos de Europa. Así, comenzaron a investigarla a ella y a su familia, y descubrieron que Estefanía, la hija de Ana María, actuaba como consorte de la organización, mientras que su pareja, José Antonio, era "el principal líder de la organización, el que daba las instrucciones al resto de la organización".

Según la Guardia Civil, José Antonio es "bastante inteligente, controlador, metódico, y con un carácter moldeable por su pareja, Estefanía". El hombre realizaba su trabajo desde su despacho y tenía "en casa un gimnasio con jacuzzi, por lo que solo salía de casa para lo imprescindible". Pese a que Estefanía y José Antonio intentaban no llamar la atención de sus vecinos, en las redes sociales no ocultan su alto nivel de vida.

El presunto líder, su mujer y su suegra disfrutaban de múltiples viajes, tal y como se puede ver en el vídeo principal que acompaña a la noticia, y su de gran afición por la música electrónica. La pareja acudía a grandes festivales por toda Europa, y es en uno de ellos donde conocen a un hombre que, según la guardia Civil, es la pieza clave para su negocio.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2019 que laSexta ha vuelto a emitir este viernes.