A pesar de contar con 171 votos favorables, la ley de amnistía, presentada por el PSOE, no ha conseguido los 176 votos necesarios para ser aprobada. Los siete diputados de Junts, finalmente, no han apoyado a los socialistas con sus votos. Andrea Ropero se ha trasladado hasta el Congreso para poder charlar con los diputados antes y después del debate.

Oskar Matute, portavoz en el Congreso de EH Bildu, ha calificado la presión de Junts al gobierno como "algo peligroso para todos". "No sé si el escenario de que se cansen de acordar, es mejor para ellos, pero, en cualquier caso, respetamos lo que puedan hacer y acordar", añade. Sobre la legislatura, Matute indica que "parece poco viable". "No imagino que se pueda sostener una situación así de manera continua, pero la alternativa de un gobierno de derechas es peor para todos", añade.

Esther Peña, portavoz nacional del PSOE, considera que el Partido Socialista ha demostrado que "estamos cómodos con este texto sólido, constitucional e impecablemente legal". Sobre si continuarán dialogando con Juntos, Peña indica que las "posturas no son fáciles" pero que continuarán dialogando ya que no tienen ningún miedo.

Cuca Gamarra, secretaria general del Partido Popular, afirma que parece que, para el Partido Socialista, esta ley "es el centro de toda su legislatura". Sobre que el gobierno no haya cedido a las presiones de Junts, Gamarra opina que "si retiran la ley habrán dicho no, pero si mantienen la ley no han dicho no, han dicho más adelante".