Una vecina de la mujer asesinada este martes en Sant Joan Despí (Barcelona), presuntamente por su pareja, había llamado meses atrás a la policía local advirtiendo de que oía gritos y lloros que salían de la vivienda.
El ayuntamiento de la localidad ha explicado que en el mes de agosto de 2019 la policía local recibió una llamada alertando de que se estaba produciendo una discusión en el domicilio de la víctima, aunque los agentes que se desplazaron al lugar no oyeron nada al llegar y nadie les abrió la puerta de la vivienda.
La vecina que hizo esa llamada ha asegurado a los medios que las discusiones entre la pareja, que compartían vivienda desde hace unos cuatro años, eran "prácticamente diarias" y que la mujer asesinada tenía una hija adolescente a la que también escuchaba llorar durante las riñas.
Sobre las 03.00 horas de este martes, los Mossos d'Esquadra han encontrado en el interior de la vivienda el cadáver de la mujer y poco después han detenido a su pareja, un hombre español de 45 años, cuando intentaba huir cogiendo un vuelo desde el aeropuerto de El Prat.
"Una noche, hace unos meses, las discusiones eran muy acaloradas, se oía ruido de muebles, de empujar muebles, dar patadas. Como era tarde, de madrugada, yo llamé a la policía", ha explicado la vecina, que habló con la Policía local cuando llegaron, pero ha explicado que no sabe qué pasó cuando los agentes se dirigieron al domicilio de la víctima.
La vecina, que se ha mostrado consternada por los hechos, ha insistido en que ella "ya había dado aviso de que en este piso había problemas" y ha explicado que estaba sensibilizada con la situación porque había vivido un caso de violencia machista de cerca.
"Cuando lo has vivido de cerca, parece que te das cuenta de que puede ocurrir más veces de las que pensamos", ha indicado. Más allá de esta llamada, el ayuntamiento no tiene constancia de ningún aviso más ni de que la víctima se hubiera dirigido a alguno de los servicios municipales de atención a las mujeres.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) también ha informado de que el detenido no tiene antecedentes judiciales por agresiones machistas contra ella. Se trata de la séptima víctima mortal de la violencia machista en lo que va de año, la tercera en Cataluña, y la 1.040 desde que comenzaron a registrarse las estadísticas, en 2003.