El acoso sexual no solo puede venir de parte de algún compañero de trabajo o de un superior dentro de la plantilla. Laura Castelló, responsable de mujeres, igualdad y diversidad de CCOO, afirma que "también se produce a manos de otras personas que no son compañeros de trabajo, sino clientes".
Es lo que denuncian las camarera de piso: "Verte arrinconada en un cuarto de baño por un cliente que te está avasallando te hace sentir mucho más violenta", manifiesta la portavoz de 'Las Kellys' en Madrid, María del Mar Jiménez. Se sienten desprotegidas ante los ataques machistas que tienen que soportar por parte de algunos de los clientes en los hoteles.
Laura Castelló cuenta que "alguna compañera ha manifestado haber pasado a hacer alguna habitación y encontrarse a un cliente desnudo". "Incluso en algún caso, ha manifestado el haber encontrado a un cliente directamente masturbándose", denuncia.
Para evitarlo, desde CCOO exigen la creación de un protocolo específico para este sector. Bajo el lema 'El cliente no siempre tiene la razón', piden compromiso a las empresas para que sus trabajadoras se sientan cómodas. Y proponen algunas medidas: "A través de un botón de alarma que la trabajadora en una situación extrema pueda pulsar o que a ciertas horas puedan ir dos trabajadoras en vez de una sola", explica la responsable de mujeres, igualdad y diversidad de CCOO.
Medidas mínimas pero fundamentales, dicen, para prevenir esta situación y para garantizar entornos de trabajo seguros para estas trabajadoras.