Logroño,Petrer (Alicante), Salou (Tarragona), Badalona (Barcelona)... En los últimos meses se han sucedido denuncias de agresiones sexuales protagonizadas por grupos de menores en los que participan chicos muy jóvenes, algunos de ellos incluso de menos de 14 años. ¿Qué ocurre en estos casos?

La ley de responsabilidad penal del menor establece que los menores de 14 son inimputables. Se entiende que las infracciones que suelen cometer los niños menores de 14 años son generalmente irrelevantes y se establece que en los casos en los que generan alarma social, la familia y la asistencia civil son suficientes. Es decir, no es necesario que intervenga el aparato judicial sancionador del Estado.

Cifras preocupantes

Pero la creciente implicación de estos menores en casos de agresiones sexuales es, cuanto menos, preocupante. En su última memoria, la Fiscalía General del Estado alertaba del "progresivo e importante" incremento de los delitos sexuales con menores implicados: 2.625 procedimientos abiertos en 2021, frente a los 1.271 registrados cinco años antes.

Eran cifras de delitos presuntamente cometidos por chicos de entre 14 y 17 años, porque cuando los agresores son más pequeños, los casos se archivan. Según la misma memoria, en 2021 se archivaron 8.433 diligencias por esa causa.

El informe no especifica el tipo de delito y advierte también de que la evolución de las cifras sobre menores de 14 años presenta una trayectoria con dientes de sierra y bruscas subidas y bajadas que impiden extraer conclusiones criminológicas del comportamiento de este grupo. Sí es un dato objetivo, apunta no obstante la Fiscalía, que en gran parte de los casos de acoso escolar están implicados menores de 14 y que "sigue siendo preocupante el incremento de su participación en delitos contra la libertad sexual o cometidos a través de las tecnologías de la información y la comunicación".

Consecuencias cuando un menor de 14 años comete un delito

Al archivarse las diligencias, los fiscales de menores remiten los casos a los servicios autonómicos de protección de menores. Estos ofrecen a los chicos y sus familias programas adecuados a los distintas conductas y necesidades, pero no siempre hay recursos adecuados.

El objetivo de los distintos protocolos y programas autonómicos es sensibilizar a estos menores sobre las consecuencias de sus actos para prevenir la reincidencia y posibilitar la reconciliación con las víctimas y la reparación de los daños causados, además de orientar a los padres.

Sin embargo, no se les puede aplicar medidas que recorten libertades o derechos y esto lleva a que no sea posible el internamiento o la imposición de una medida de alejamiento respecto a la víctima.

La única vía para su internamiento sería que fueran declarados en desamparo, pero se trataría de una medida para la protección del menor.

Los cambios de la ley del 'solo sí es sí'

La ley del 'Solo sí es sí' agravó el castigo en los casos de menores de 14 a 17 años. La responsabilidad penal del menor ha cambiado y ahora se obliga al internamiento en régimen cerrado para todos los agresores.

Antes se dictaba ese internamiento en los casos de agresión con violencia o violación, pero ese castigo se extendió a conductas que antes eran consideradas solo abusos, medida que los juristas han alertado que puede ser desproporcionada y que el PSOE ha decidido corregir al reformar la norma.

El 016 es el teléfono de atención a las víctimas de violencia machista. Está disponible 24 horas al día los 365 días al año. La llamada es gratuita y no deja huella en la factura, aunque hay que eliminarlo de las últimas llamadas.