Nueva ley antitabaco

Hostelería de España califica de "desproporcionada" la prohibición de fumar en terrazas

El contexto El Gobierno ha dado este martes luz verde a la nueva ley antitabaco. La medida con mayor impacto es que el Gobierno quiere prohibir el tabaco en las terrazas de los bares.

Varias personas en la terraza de un bar en Madrid
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Hostelería en España no está contenta con la nueva ley antitabaco. De hecho, la consideran "desproporcionada" ya que indican que la prohibición de fumar en terrazas "repercutirá muy negativamente en sus negocios".

La nueva ley antitabaco promete revolucionar este país al menos tanto como la primera. El Gobierno quiere desterrar de la vida pública los cigarros tradicionales y los electrónicos. Estará prohibido fumar en las marquesinas de los autobuses, en los coches profesionales y en todo el recinto de universidades, exteriores incluidos.

También se fija un perímetro de lo que llaman "protección reforzada" de 15 metros en los lugares en los que hasta ahora no se podía fumar: parques, centros escolares, hospitales, museos... Y quizá la medida con mayor impacto es que el Gobierno quiere prohibir el tabaco en las terrazas de los bares. Para Hosteleros de España, se trata de una propuesta desproporcionada que repercutirá muy negativamente en sus negocios.

La Confederación empresarial de Hostelería de España ha calificado de "desproporcionado" el contenido del anteproyecto y también ha resaltado que "existe una buena convivencia entre fumadores y no fumadores en las terrazas".

En un comunicado ha destacado que, entre los efectos de prohibir fumar en terrazas no descarta la "confusión" que puede generar entre los turistas que cada año visitan España, a la vez que ha afirmado que su entrada en vigor tendrá un "efecto negativo" desde el punto de vista turístico y para la imagen exterior del país.

Para esta organización, las terrazas son unos espacios "clave" para la vida social y económica del país, por lo que cualquier decisión debe "valorar con seriedad" su impacto real en términos de empleo, actividad empresarial, competitividad turística y experiencia de los clientes.

Por su parte, la Mesa del Tabaco, que aglutina a cultivadores, estanqueros, empresas fabricantes y distribuidores, ha expresado en un comunicado que España es "uno de los países con regulaciones más avanzadas" y, por ello, ha considerado que las medidas ya existentes "funcionan", por lo que "no es necesario restringir más".

A su juicio, actualmente "existe una convivencia pacífica entre fumadores y no fumadores", a la vez que ha defendido que el debate de los espacios se centre en los entornos con presencia de menores "significativa", como instalaciones deportivas infantiles o zonas de juego, pero "no en terrazas de hostelería al aire libre".

Además, la Unión de Empresarios del Vapeo (UPEV), que aglutina a fabricantes de líquidos para cigarrillos electrónicos, distribuidores y comercios minoristas dedicados a la venta de estos productos, ha mostrado su convencimiento de que esta normativa favorecerá el mercado negro. El nuevo marco legal "va a conseguir doblar el número de menores vapeando e inundar España de productos ilegales y dudosa seguridad", ha advertido.

Consumo y cambios normativos

Las ventas de cigarrillos en España en el último año cerrado (2024) se situaron en 2.143 millones de cajetillas, lo que supone una reducción del 53,8 % respecto a 2005, el año en el que se aprobó la primera ley que prohibía fumar en espacios cerrados, una norma que entró en vigor en enero de 2006.

De acuerdo con los datos del Ministerio de Hacienda, en España se vendieron 4.634 millones de cajetillas de 20 cigarrillos en 2005, una cifra que se redujo un 2,81 % en 2006 con esa primera norma, que incluía la regulación, la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco.

De facto, según ha recordado este martes la ministra de Sanidad, Mónica García, al presentar el nuevo anteproyecto de ley antitabaco, esta primera norma supuso la prohibición de fumar en espacios cerrados. Cinco años más tarde se eliminó por completo el tabaco en los locales de restauración, ha recordado García.

Con este cambio, en 2011, la venta de cigarrillos fue de 3.015 millones, aún un 28 % por encima de las que se han vendido en 2024. Según los datos del índice de precios de consumo (IPC), el precio del tabaco, en general, ha subido un 140 % desde diciembre de 2005 -cuando se promulgó la primera ley- hasta el mismo mes de 2024.

Si bien esta medida no gusta al sector hostelero, tampoco acaba de hacerlo para la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), pues la considera del todo esto insuficiente.