Hablamos con Lucía. Ella salió de fiesta por la noche hace unas semanas y a la vuelta, mientras esperaban al metro, vivieron un episodio de violencia sexual. Le ocurre al 60% de las mujeres durante su ocio nocturno.

'Empezaron a insultarnos, a llamarnos de todo. Fue horrible'

"Se acercaron unos chicos que habían estado en la misma discoteca que nosotras y nos intimidaron hasta que uno de ellos le tocó la pierna a una amiga mía", relata la propia Lucía. Su reacción inmediata fue pedirles que se marcharan pero no encontraron la respuesta que esperaban: "Empezaron a insultarnos, a llamarnos de todo. Fue horrible".

Lucía reconoce que no es la primera vez que vive esta situación en una noche de fiesta y su caso podría extrapolarse a la del resto de mujeres. Según el último informe del Observatorio Noctámbul@s, seis de cada diez mujeres en España sufre violencia sexual en espacios de ocio nocturnos.

Tocamientos indeseados, intimidación, acoso verbal... Conductas que suelen ir acompañadas de alcohol y drogas: más del 70% de los agresores reconoce haber consumido este tipo de sustancias antes de adoptar estos comportamientos. Por eso las asociaciones piden reorganizar estos espacios e imponer más medidas de seguridad.

"Las mujeres desplegamos toda una serie de estrategias para ir seguras: cambiar nuestros itinerarios, ir por calles iluminadas, avisar a amigas cuando llegamos a casa...", apunta Ana Burgos, coordinadora del Observatorio Noctámbul@s.

El informe de este observatorio detecta además que las mujeres tienen interiorizada esta violencia sexual nocturna mientras que ellos no la identifican. Y apuntan que casos como el de La Manada en Pamplona han despertado la concienciación, pero avisan: aún se necesita más proteción para que de camino a casa ellas no tengan sentirse valientes.