Las personas mayores conocen lo que es el reciclaje, la separación de residuos, o la economía circular. Quizás no todos estén familiarizados con estos términos, pero lo ponen en práctica desde hace años: guardando los restos de comida para alimentar a sus animales, reutilizando la ropa del primer hijo al último, creando compost casero para emplear en el campo, usando una vieja botella de plástico como regadera para sus plantas, o aprovechando las frutas maduras para hacer mermelada y no desperdiciarlas.

Su implicación en el cuidado del medio ambiente y el reciclaje ha sido y es fundamental, aunque precise de cierta actualización. En España, a 1 de enero de 2018 había 8.908.151 personas de más de 65 años, según datos del INE. Por ello, el proyecto 'Terceros en edad, primeros en reciclar' de Ecoembes sirve para acercar a esta población el reciclaje desde sus necesidades e intereses. También, para hacerles partícipes y empoderarles en una sociedad en la que la preocupación por el medioambiente es creciente.

A través de actividades lúdicas, talleres y excursiones, que se practican en un total de 250 centros y residencias de Asturias, Cantabria, Aragón y La Rioja, los mayores se convierten en auténticos "embajadores" del reciclaje.

"Tienen mucha cultura del ahorro, del no despilfarro, de reciclar, de reutilizar… en definitiva, del consumo responsable", señala Beatriz Aylagas, encargada de Responsabilidad Social Corporativa de Ecoembes. Por ello, "con un poco de apoyo y un proyecto específico acorde a sus necesidades", pueden ser auténticos activistas medioambientales.

Cuando los mayores enseñan a los pequeños

En el centro de Participación Activa Zona Sur de Logroño, los mayores aprendieron y enseñaron a reciclar realizando actividades intergeneracionales con niños y niñas de colegios cercanos el año pasado. "Fueron los profesores de los pequeños y prepararon juegos. Por ejemplo, una vez hicieron marcos personalizados con cartón reciclado. Después, se tomaron fotos juntos y se las llevaron de recuerdo", explica Raquel Alvero, trabajadora social del centro.

"Se empoderan porque ven que tienen mucho que aportar"

Alvero asegura que el proyecto gusta tanto a los mayores, que "participan de manera voluntaria y llenan las actividades", como a los trabajadores, que observan como abuelos y abuelas se empoderan viendo que "tienen mucho que aportar".

Pero las actividades del proyecto no solo se centran en compartir aprendizaje con los más pequeños, también se realizan otras actividades: diferentes juegos, manualidades en las que construyen cestas con papel reciclado o macetas con latas, y salidas a centros relacionados con el reciclaje, como el Ecoparque de La Rioja o The Circular Lab, el centro de innovación especializado en economía circular de Ecoembes.

Los mayores del Centro de Día General Dávila utilizan materiales reciclados para crear sus propias manualidades.

Los trabajadores también se benefician

'Terceros en edad, primeros en reciclar' no se reduce solo en hacer actividades de animación y formación con los residentes o usuarios de los centros. Va más allá. Los centros residenciales o de día que participan reciben diferentes cubos de basura para que resulte más sencillo separar los residuos. Además, los pasillos de los edificios quedan llenos de señalizaciones y dibujos que te recuerdan cómo debes utilizarlos.

Michel, director de la residencia cántabra DomusVi Stella Maris, cuenta que los agentes de Ecoembes también se centran en formar e incentivar a trabajadores y trabajadoras. De esta manera, actúan todos a una, comprometidos con el reciclaje en el centro.

De los centros, a casa: "el compromiso total"

Todo lo que aprenden los mayores en las charlas y juegos que hacen con los educadores lo ponen en práctica en los centros y en sus propias casas: "Nos ha impactado porque no solo se han formado sino que han sido también transmisores, incluso leen la cartilla a sus familiares cuando ven que no tiran la basura donde deben. El compromiso es total", señala Rosaura, directora del Centro Social de Día General Dávila.

En ese centro realizaron manualidades con productos reciclados y consiguieron fabricar unos bolos con plástico. "Son actividades que les ayudan a favorecer su movilidad, y además, después los utilizan para jugar con sus nietos", cuenta Rosaura.

El proyecto 'Terceros en edad, primeros en reciclar' ha sido tan bien recibido que no quieren parar de hacer actividades que favorezcan el cuidado del medioambiente. Por ejemplo, explica Rosaura, quieren colaborar con el proyecto 'basuraleza', yendo a hacer batidas a la playa.