Un hombre de 46 años ha muerto tras saltar por la ventana de su vivienda, en Barcelona, para huir del incendio que ha calcinado totalmente el piso.
El fuego ha obligado a desalojar de forma preventiva a 45 vecinos, seis de los cuales han tenido que ser trasladados a centros hospitalarios.
Además de destruir el piso de la víctima, las llamas se han propagado por la fachada y han afectado las ventanas de los pisos inmediatamente superiores, en la sexta y la séptima planta del inmueble.
El agua de la extinción ha afectado el piso inferior, cuyos vecinos han tenido que ser realojados debido a una afectación estructural en el forjado del techo.