Asesina del niño Gabriel
El funcionario señalado por favorecer a Ana Julia Quezada niega haber tenido sexo a cambio de un móvil
El contexto Ni tuvo sexo con Ana Julia ni sabe nada de un móvil... Es lo que ha declarado este miércoles ante los juzgados de Ávila el funcionario de la cárcel de Brieva, investigado por favorecer a la asesina del niño Gabriel Cruz.

Resumen IA supervisado
El funcionario de prisiones investigado por cohecho en el caso de Ana Julia Quezada ha negado haber mantenido relaciones sexuales con la reclusa, condenada por el asesinato de Gabriel Cruz. El juzgado de Ávila investiga desde hace un año si el trabajador facilitó un móvil a Quezada a cambio de favores sexuales. Durante su declaración, el funcionario negó conocer el teléfono y haber avisado a Quezada sobre cacheos en celdas. Las diligencias judiciales surgieron de una denuncia de la Guardia Civil, y se investiga la posible implicación de más personas. Ana Julia Quezada también ha sido noticia por la denuncia de Patricia Ramírez, madre de Gabriel, quien afirmó que Quezada había manifestado querer matarla. Esta situación se relaciona con un móvil en prisión y un documental sobre el caso.
* Resumen supervisado por periodistas.
El funcionario de prisiones investigado por cohecho en el caso de Ana Julia Quezada, conocida por haber asesinado al niño Gabriel Cruz, ha declarado este miércoles en los juzgados de Ávila y ha negado haber mantenido relaciones sexuales con la reclusa, que cumple su sentencia en la prisión de Brieva de esa misma provincia.
El juzgado número 4 de Ávila investiga desde hace casi un año un posible delito de cohecho un trabajador de esa prisión que habría facilitado a Quezada un teléfono móvil a cambio de favores sexuales. Pero en su testificación, el funcionario ha negado esas relaciones sexuales con Ana Julia y ha dicho no saber nada de un teléfono móvil, según ha contado Verónica Guerrero, abogada de Patricia Ramírez, madre del niño asesinado: "Ni él las propiciaba ni Ana Julia las ofrecía", ha precisado sobre esa declaración, tras haber estado presente.
Este funcionario, que vigilaba varios módulos de la prisión, está señalado por haber avisado a Ana Julia de los cacheos y reconocimientos que se hacían en las celdas, para que así guardase el móvil que dice desconocer.
El investigado llegaba a los juzgados en la mañana del miércoles oculto bajo una capucha, mascarilla negra FFP2 y gafas de sol. El investigado, que solo ha respondido a preguntas de su abogado, ha evitado hacer declaraciones a la prensa, pero su abogado si ha expresado que él es el primer interesado en que se aclare esta situación.
Las diligencias judiciales se incoaron a raíz de una denuncia de la Guardia Civil, y el Juzgado sigue practicando diligencias ante la posiblidad de que existan más implicados en los hechos.
La propia Ana Julia declaró por este mismo caso el pasado 28 de abril, si bien no ha trascendido información de su testimonio hasta el momento.
"Me quiere matar"
La asesina confesa de Gabriel Cruz, que acabó con su vida en Almería en febrero de 2018, ha vuelto a ser noticia en las últimas semanas no solo por este caso, sino también por la denuncia que llevó a cabo la madre del niño, Patricia Ramírez, que denunció en una rueda de prensa que Quezada había manifestado dentro de prisión que la quería matar.
La situación estaba relacionada por el asunto del móvil en prisión, pues la propia Ramírez la que denunció, en mayo de 2024, que la asesina de su hijo tenía un móvil en su celda y que en la cárcel ayudaban a Ana Julia Quezada a participar en un documental sobre el suceso.
"La asesina de mi hijo, dentro de prisión, ha manifestado que me quiere matar. Estaba muy enfadada conmigo porque le había roto el documental. Entré en alarma cuando expresó que se quiere vengar de mí. Por otras fuentes tengo constancia que personas de su círculo también querían vengarse", ha indicado. Patricia Ramírez está personada como “acusación popular” no particular.