El polémicoplan antiaborto de Vox en Castilla y León no es una ocurrencia exclusiva en España. Los expertos advierten de la existencia de una estrategia global de la ultraderecha.

"Vemos que existe un corta y pega de estas posiciones en países muy diferentes", ha indicado a laSexta Pedro Rodríguez, periodista y profesor de la Universidad Pontificia de Comillas. Rodríguez señala a personajes como Steve Bannon, en Estados Unidos, "que se han dedicado a formar lazos internacionales".

El movimiento antiabortista es muy fuerte en Estados Unidos, y en el estado de Texas "ha venido siendo en la lucha por el aborto una primera línea de frente", asegura Rodríguez. Incluso antes de que el Tribunal Supremo derogara el derecho al aborto, implantó una legislación conocida como el heartbeat: el latido de corazón. "Según ésta, cuando se puede apreciar en el feto el latido del corazón se prohibe realizar abortos, y esto suele ocurrir a las seis semanas", señala Rodríguez.

Una medida que desde 2011 fue instaurada en otros estados. Pero existe un caso mucho más cercano. Desde septiembre escuchar el latido del corazón del feto es obligatorio en Hungría para aquellas mujeres que decidan interrumpir el embarazo. La psicóloga Diana Sánchez ha explicado a laSexta que "siempre que sea algo que se ha hecho contra la voluntad es una coacción y un chantaje".

En ese supuesto, los especialistas alertan sobre los efectos negativos para las mujeres, que pueden "sentir más culpa y vergüenza". "El hecho de escuchar el latido provoca más vinculación", sostiene Sánchez.