Ana Obregón ha escrito una emotiva carta a Beatriz, la madre de las niñas que desaparecieron en Tenerife, tras confirmarse el hallazgo del cadáver de Olivia, la hija menor, de seis años. "Querida Beatriz, poco puedo decirte, porque no hay consuelo. Cuando una madre pierde un hijo nos entierran en vida", ha expresado en una publicación en su perfil de Instagram.

Así, Obregón ha mandado "todo su amor" a la madre de Anna y Olivia y le ha recordado que no está sola, sino que "toda España" está con ella: "No voy a pedirte que seas fuerte, ni que pienses que está en el cielo, ni todas esas cosas que nos dicen con cariño pero que no nos ayudan en nada. Solamente puedo mandarte todo mi amor y decirte que no estás sola. Toda España está contigo y somos muchas las madres que han perdido a su hijo y que lloramos contigo".

Además, la presentadora ha contado que ha seguido la historia de "esperanza y valentía" de Beatriz desde el principio de la tragedia y ha manifestado que espera que Tomás Gimeno, a quien ha calificado de "cabrón y asesino", esté vivo. "Solamente pido que ese cabrón y asesino esté vivo. A los mierdas hay que llamarles por su nombre" ha expresado de forma tajante.

En la misma línea, la actriz y bióloga ha manifestado: "Si la justicia fuera justa, cuando le cojan que no entre en la cárcel unos años como hacen con todos los asesinos de sus hijos, sino que deberíamos lapidarle entre todos, y yo tiraría la primera piedra", ha afirmado abiertamente, tras lo que ha deseado a Olivia que "descanse en paz".

Ana Obregón está viviendo un momento complicado, tras la muerte de su madre hace tan solo unas semanas y la de su hijo hace un año, a quien recuerda habitualmente en sus redes sociales con fotos de momentos especiales para ambos, como la graduación del joven el 9 de mayo de 2014, día del que habla como "de los más felices" de la vida de ambos.

Además, desde que falleciera su madre, la actriz ha compartido instantáneas familiares en las que aparecen los tres. En una de las publicaciones, contaba que se había despertado "totalmente convencida" de que los tres últimos años de su vida "habían sido una pesadilla". Sin embargo, la realidad, le "pegó una bofetada". "Me gustaría soñar esta noche que os tengo cogidos de la mano y no despertar nunca", confesó en una publicación que acompañó de una fotografía en la que salía junto a su madre y su hijo.