Fundó una compañía destinada a prevenir el ciberfraude y ahora ha sido condenado precisamente por defraudar millones de dólares a sus inversores. Es el caso de Adam Rogas, cofundador y antiguo CEO de NS8, a quien un tribunal de Nueva York ha sentenciado a cinco años de prisión por crear datos financieros fraudulentos y obtener así 123 millones de dólares para financiar su empresa, de los cuales obtuvo personalmente 17,5 millones.

La Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York ha informado este jueves de la decisión judicial, en un comunicadoen el que señala que Rogas ya se declaró culpable el pasado mes de marzo. El magistrado, el juez, John P. Cronan, ha calificado el fraude cometido por el acusado como "descarado, calculado y de larga duración".

Según el fiscal Damian Williams, el ahora condenado "llevó a un extremo criminal el dicho 'fake-it-till-you-make-it' [finge hasta que lo consigas]": "Mientras decía estar en el negocio de prevención del fraude, el propio Rogas falsificó casi todos los clientes de su compañía, su beneficio y bienes", señala Williams, que agrega que, de esta forma, estafó a sus inversores más de 100 millones de dólares.

Rogas no solo cofundó NS8, sino que ejerció como CEO, CFO y miembro de la junta de dirección de la empresa, de la que era el principal responsable de las actividades para recaudar fondos. En concreto, la compañía se dedicaba a desarrollar y vender herramientas electrónicas para ayudar a vendedores online a evaluar el riesgo de fraude en las transacciones con sus clientes.

El ahora condenado logró 123 millones de dólares en inversiones utilizando datos financieros engañosos, manipulando extractos bancarios para reflejar beneficios ficticios. Así, durante el proceso judicial ha quedado constatado que, entre enero de 2019 y febrero de 2020, entre el 40 y el 95% de los supuestos activos de la empresa eran falsos, con extractos que reflejaban más de 40 millones en ingresos ficticios. Además, falsificó a casi todos los supuestos clientes de la empresa en hojas de cálculo de seguimiento interno.

El propio Rogas obtuvo 17,5 millones de dólares en ganancias, que utilizó, entre otras cosas, para comprar artículos de lujo y una residencia en República Dominicana. Ahora, además de la pena de cinco años de prisión, el empresario de Las Vegas ha sido condenado a tres años de libertad vigilada y a pagar más de 17,5 millones de dólares.