A Claudia, sus padres están intentando quitarle los pañales mientras ella ya es capaz de leer, escribir o tocar el piano. Según informa el Ideal, esta niña de dos años tiene un cociente intelectual de 146, muy por encima de la media, que se sitúa entre 90 y 110.

A los 11 meses ya había aprendido a leer y ahora no solo sabe escribir, sino que redacta sus propias poesías que han recopilado sus padres para publicar en lo que será su primer libro. Además, ya es capaz de localizar países en un mapa y reconocer obras de arte.

"Cualquier cosa que tenga un razonamiento lógico se le puede enseñar. En 15 minutos ha aprendido algo nuevo. A veces yo estudio por las noches, para poder ayudarle a aprender cosas nuevas por la mañana", explica su madre a dicho medio.

Antes de que su hija ingrese en el colegio, los padres luchan por intentar que sus capacidades se vean satisfechas. "Es importante que se atiendan sus necesidades. Que tenga una respuesta educativa", dicen los padres. Mientras, Claudia sigue aprendiendo y jugando.