El pasado 25 de julio un hombre asesinó a puñaladas a su hijo de 11 años y luego se suicidó en la localidad murciana de Beniel.

Después de que la madre alertara de que el padre no había devuelto a su hijo a la hora establecida en el régimen de visitas, varios agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil se desplazaron hasta el domicilio del hombre y descubrieron el crimen.

El menor se encontraba muerto tendido en el suelo y su padre se había ahorcado en la cocina. El hombre tenía antecedentes por violencia machista y meses antes había quebrantado la orden de alejamiento que le impedía acercarse a su exmujer.

La mujer, Laura Hernández, contó que su marido tuvo una "conducta obsesiva durante años" y reveló que tras su separación tuvo que soportar "dos años y medio de maltrato psicológico".

"La Guardia Civil dijo que me iban a poner protección y que nos iban a estar vigilando a mí y al crío porque ya había subido al nivel alto y por aquí no ha aparecido ni dios. Lo único que han hecho ha sido llamarme por teléfono una vez a la semana para ver cómo estaba y punto", denunció.

Ahora, Laura ha escrito una carta dirigida a Felipe VI en la que le pide más implicación para evitar más casos así.

Este es el texto completo, publicado por La Opinión de Murcia:

"Majestad, soy Laura. Usted no me conoce de nada. Soy una mujer, pero sobre todo una madre que le escribe desde el dolor más desgarrador que hay: el de que te asesinen a un hijo. Al mío lo asesinó un monstruo, su propio padre. Le escribo en voz mía, y en voz de otras muchas familias, muchísimas, que están pasando por este infierno; pero, sobre todo, en voz de nuestros niños, ya que ellos no pueden hacerlo.

Le pido a usted, como jefe del Estado, que mire por su pueblo, por su país, y que haga lo que esté en su mano para que la Justicia española cambie: hay leyes que no se cumplen, pero hay leyes que hay que modificar.

No queremos que, cuando maten a un niño, mujer u hombre, le pongan de condena 20 años y a los 10 ya tengan permisos de salida. Nuestros hijos nunca saldrán de donde están. Exijo también que pongan una mayor protección a los niños inocentes cuando se van con sus padres, al estar separados, y haya denuncias de maltrato y órdenes de alejamiento. Que, por favor, los protejan. Al mío nadie lo protegió porque no veían riesgo, no veían que él se había saltado ya una orden de alejamiento y aun así tenía que irse con su padre. ¿A quién tengo que pedir yo responsabilidades?

Majestad, usted es padre. Como padre, piense en sus hijas y en los hijos de los demás.

No sé si llegará a leerme, lo más probable es que no. Pero, quien lo haga, que traslade desde aquí lo que a usted le pido: un cambio de leyes ya. Sin más, me despido de usted. Un saludo desde Murcia".