Noboa promete más

Cae (otra vez) el capo más buscado por Ecuador y EEUU tras huir hace medio año de la cárcel

Los detalles Se trata de José Adolfo Macías Villamar, alías Fito, quien desde entonces ha estado escondido en un búnker subterráneo había mandado construir su refugio dentro de una lujosa casa de tres plantas.

Cae (otra vez) el capo más buscado por Ecuador y EEUU tras huir hace medio año de la cárcel
Escucha esta noticia
0:00/0:00

El narco más buscado por Estados Unidos (EEUU) y Ecuador. Hacía medio año que las autoridades trataban de dar con él cuando se escapó de una cárcel de Guayaquil. Ahora, los agentes lo han encontrado escondido en un búnker subterráneo, dentro de una casa en su ciudad natal. Para ser exactos, es un escondite ubicado bajo una baldosa.

Tal y como se observa en las imágenes sobre estas líneas, se trataba de un pequeño y estrecho agujero en el que solo cabe un hombre que daba acceso al búnker subterráneo donde vivía José Adolfo Macías Villamar, alías Fito. Apuntado con armas, los miembros de la policía le exigían que diera su nombre completo, al tiempo que le instaban a que lo hiciera más fuerte.

Los agentes le han dado caza en su ciudad natal en Manta donde Fito, de 45 años, había mandado construir su refugio dentro de una lujosa casa de tres plantas con gimnasio y mesa de billar incluidos. Lo hacían tras un operativo de diez horas, cuyas pesquisas se han alargado desde que el líder de los Choneros, la banda criminal más grande de Ecuador, huyera de la prisión en la que cumplía 34 años por asesinato, narcotráfico y delincuencia organizada. Una fuga silenciosa que el narco ejecutó aprovechando la toma del país a manos de pandilleros y el caos extendido en calles y prisiones.

Era el objetivo del presidente Daniel Noboa, él mismo ha comunicado que Fito ha sido capturado y ha sentenciado que caerán más criminales, así como que recuperarán el país. Además ha pedido que sea extraditado a EEUU, donde también está acusado narcotráfico y tráfico de armas. Eso sí, por el momento, ha sido trasladado a la Roca, la prisión de máxima seguridad, donde ya protagonizó su primera fuga en 2013.