Un PSOE cada vez más incómodo por los audios de Leire Díez resiste mientras aumentan las voces críticas a su izquierda

La prensa no cesa en su intento de conocer las sensaciones que se viven en Ferraz tras salir a la luz una serie de audios de Leire Díez, presunta fontanera del PSOE, de los que se desliza una campaña de desprestigio contra la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, así como contra otras figuras como el fiscal de Anticorrupción, José Grinda. Ante un silencio como respuesta, llama mucho la atención, la incomodidad del socialismo con estos audios.

"¿En algún momento se va a plantear el Gobierno dar explicaciones por las informaciones que están saliendo del PSOE?", preguntaba una periodista de laSexta al ministro de Justicia, Félix Bolaños, a primera hora de este viernes. "Gracias, voy al acto de entrega de despachos. Gracias", ha replicado el socialista. Mismo resultado cordial a su salida cuando se le ha cuestionado si "¿Leire Díez seguía instrucciones del partido?". "Hasta luego", ha respondido.

Está claro que desde el Gobierno pasan de puntillas en el tema. De hecho, mientras que hay ministros que esquivan preguntas, otros como la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se limitan a remitir al expediente informativo abierto por parte de la formación. "Se ha abierto expediente informativo a esta persona. Si de ahí se desprende alguna conducta reprochable o irregular, se llevará hasta sus últimos términos", ha asegurado desde el municipio malagueño de Antequera.

Incluso, llegan a hablar de una estrategia aireada por el Partido Popular (PP) que corresponde, según ellos, al objetivo de desgastar al Ejecutivo en base a acusaciones que no se han probado. Ha sido el portavoz del grupo socialista en el Congreso de los Diputados, Patxi López, quien ha subrayado que están "absolutamente hartos de cacerías y de montajes". Entonces, ha destacado que será "en base a la verdad" la adopción de "decisiones que haya que adoptar": "Estamos hartos de montajes", ha zanjado.

Pero la presión a la izquierda de los socialistas no para de crecer, incluso, por parte de sus socios de coalición. "La corrupción es absolutamente intolerable en democracia. Tolerancia cero y contundencia toda", ha remachado la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. En esa línea, también se ha pronunciado la ministra y portavoz de Más Madrid, Mónica García, quien a su vez ha considerado que "el PSOE tendrá que tomar medidas y tendrá que asumir responsabilidades"

Y es que desde las formaciones que alberga el paraguas de Sumar piden llegar hasta el final. Precisamente, la vocal de los Comuns, Aina Vidal, ha valorado este viernes en Al Rojo Vivo que es "obvio que el PSOE tiene que investigar este caso", puesto que "habrá que ver qué es lo que ha ocurrido".

Además, lamentan no haber tomado medidas más contundentes. Desde Izquierda Unida (IU), Antonio Maíllo, ha sostenido que, al menos, en su formación se habrían "abierto la suspensión cautelar de militancia como mínimo", en contraste con Ferraz que si bien abrió un expediente informativo a Díez, no contempló ninguna iniciativa preventiva respecto a su militancia. Todo, para poner fin al ruido que cada vez resuena más fuerte.