Tragedia de la DANA
El presidente de la Confederación del Júcar revela la "parsimonia" del CECOPI el día de la DANA: "Se liaban ellos mismos"
¿Qué ha dicho? Miguel Polo habla de "absoluta indecisión" por parte de las personas que estuvieron en el Centro de Coordinación Operativa Integrada del pasado 29 de octubre, mientras que en la confederación "estaban todos atacados" para que se mandaran avisos a la población.

Resumen IA supervisado
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Miguel Polo, criticó la falta de decisión y la improvisación en la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) durante la DANA del 29 de octubre. Polo expresó sorpresa ante la parsimonia observada, mientras que en la confederación urgían avisos a la población. Señaló que el sistema SAIH no falló, aunque los caudales desbordaron los sensores. Criticó la falta de contacto del Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat Valenciana para interpretar datos hidrológicos. Finalmente, destacó que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, parecía liderar el CECOPI.
* Resumen supervisado por periodistas.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, declaró ante la jueza de la DANA que en la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) del pasado 29 de octubre había "una absoluta indecisión" y "se estaba improvisando qué hacer", además de que "cuanto menos hablaras era mejor porque en todo se liaban ellos mismos".
En su declaración como testigo del pasado 19 de septiembre, a cuya transcripción ha tenido acceso EFE, el presidente de la CHJ señaló que le sorprendió "la parsimonia" que vio en la reunión del CECOPI, cuando en la confederación "estaban todos atacados" para que se mandaran avisos a la población de que subiera a pisos altos y abandonara los coches.
Polo señaló que, si tuviera que cambiar algo, no daría por hecho que Emergencias estaba "haciendo lo que toca", y afirmó que a las 10 de la mañana, con un aviso rojo, que quiere decir que se "podía generar una inundación equivalente a 100 años de periodo de retorno", ya se podían haber planificado y lanzado "los mensajes correspondientes".
El presidente de la CHJ declaró asimismo que pasadas las 18:45 horas el jefe del servicio del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) les comunicó que se había enviado un aviso de caudal del Poyo, que era "evidentemente importante, pero congruente con todo lo que estaba pasando".
"El sistema no falló"
Indicó que "1.600 metros cúbicos por segundo es un caudal de desbordamiento claro del barranco del Poyo, pero también es un caudal de desbordamiento del Magro 2.000 metros cúbicos por segundo. La gravedad de los 1.600 no son los 1.600, es que a esa misma hora ya hay 2.000 por la Horteta", hay "no se cuántos mil por el barranco de los Caballos" y entran "2.000 metros cúbicos por un cauce más pequeño que la acequia real del Júcar".
"Si solo hubiera habido 1.600 en el barranco del Poyo, no hubiera pasado prácticamente nada de lo que vimos", afirmó Polo, quien insistió en que a las 18:43 horas él no tenía información del resto de barrancos o ramblas, donde se pueden producir crecidas repentinas "y no hay tiempo material de aviso si no te has anticipado antes".
El SAIH "es muy robusto y, afortunadamente, el día 29, salvo cuando los caudales se desmadraron y empezaron a arrastrar sensores, el sistema no falló", declaró el presidente de la CHJ, quien hizo hincapié en que a los datos de este sistema tiene "acceso cualquiera" y que el SAIH "no predice", sino que "observa".
Detalló que los umbrales de aviso "no son umbrales de peligrosidad, solo tienen la finalidad de avisar de que empieza la escorrentía", y que, una vez suenan, en el tiempo de comprobación de los datos "es perfectamente posible que se solapen", pues en solo 20 minutos el caudal de la rambla del Poyo se duplicó y pasó de 800 a 1.600.
Cuando Mazón se unió, era "el que daba la palabra"
Indicó que los agentes medioambientales de la CHJ "no tienen funciones de control de cauces en avenidas" y que en algunas ocasiones "puede ocurrir que el SAIH falle" y entonces se les llama. El día de la DANA, explicó que contactó con tres agentes medioambientales que "no dejaron de estar a pie de cauce", señaló.
Polo señaló que nadie del Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat Valenciana contactó con ellos para solicitar datos o pedirles opinión o interpretación de los datos de pluviometría o hidrológicos que se estaban registrando, y que no entiende por qué en el CECOPI "no se tomaban decisiones" ni se seguían los consejos de la confederación.
Insistió en que la intervención de la CJH en el CECOPI debía ser informar sobre el estado de las presas y en que toda la información pluviométrica se trasladaba a través del SAIH de manera automática, y dijo que cuando el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, se incorporó parecía que dirigía el CECOPI porque era "el que daba la palabra".
Polo relató también las dudas de la entonces consellera de Interior, Salomé Pradas, para tomar medidas, sobre lo que el subdirector de Emergencias, Jorge Suárez, le dijo varias veces que tenía "todas las facultades para tomar todas las medidas" que considera necesarias.
*Sigue a laSexta en Google. Toda la actualidad y el mejor contenido aquí.