Tensión política
Junts sube el tono contra el Gobierno y tensa más que nunca la cuerda de la legislatura con la reunión de Perpiñán
El contexto Los de Puigdemont aprietan con cada vez más fuerza a un Gobierno de coalición que depende en gran medida de los siete diputados de la formación. "El tiempo de los ultimátum ha terminado", expresó Miriam Nogueras tras la sesión de control al Ejecutivo.

Semana de máxima incertidumbre en el panorama político español. Semana marcada por Junts. Por esa siempre tensa relación que tienen los catalanes con el PSOE. Con el Gobierno de coalición. Con uno que depende en gran medida de qué decida votar en según qué cuestiones la formación que lidera Carles Puigdemont. Una que sopesa consultar a su militancia sobre si debe o no seguir apoyando a los socialistas y a Sumar. Una que tiene la legislatura en su mano.
Porque Junts aprieta. Porque, de cuando en cuando, lo hace. Porque así lo ha expresado Miriam Nogueras, quien ha afirmado de forma rotunda que "el tiempo de los ultimátum ha terminado". Que "el presidente del Gobierno no ha sabido aprovecharlo". Que ha dado comienzo a una serie de movimientos, de dudas y de cuestiones. De, incluso, la posibilidad de una moción de censura.
Pero eso ya sería algo más que apretar. Ya sería ahogar. Y, de momento, Junts no ahoga. La opción de terminar con el Gobierno de coalición de PSOE y de Sumar con Feijóo y Abascal de alternativa no está en la mesa de la formación. Siempre se habla de ella, pero ellos lo han dejado claro. "Ni de coña", afirman, exponiendo que PP y PSOE "son lo mismo" y que "sería un error".
Eso sí, el Gobierno ha tomado nota. El PSOE ha apuntado bien en la agenda lo que Junts demanda y busca y lo que podría pasar en caso de que dijeran 'basta'. La legislatura, que quieren que llegue a 2027, depende de siete diputados de una formación que ha subido el tono en la sesión de control al Gobierno, señalando que había llegado "el momento de empezar a hablar de la hora del cambio".
Uno que Sánchez quiere empezar por el Viejo Continente. El presidente ha pactado con Friedrich Merz, canciller de Alemania, trabajar para hacer oficiales el catalán, el euskera y el gallego en la Unión Europea.
"La incorporación de estas lenguas constituye una parte esencial de la identidad nacional plurilingüe de España", han destacado fuentes consultadas por laSexta. Todo, tras el ultimátum de Junts.
Las conversaciones entre países, según una declaración conjunta de España y Alemania, "comenzarán a la mayor brevedad" para "presentar un texto para debate y la decisión de los 27 en una futura reunión del Consejo de Asuntos Generales". Serán José Manuel Albares, ministro de Exteriores de España, y Johann David Wandephul, su homólogo teutón, quienes se encarguen del asunto.
Mientras, Salvador Illa, president de la Generalitat, ha celebrado el acuerdo en redes: "Estamos más cerca de lograr que el catalán sea oficial en la UE. Tengo plena confianza en que lo haremos posible".
Porque a pesar de que Sánchez se muestra tranquilo ha movido ficha. Porque, desde Bruselas, ha asegurado que "cuando toque" se reunirá con Puigdemont. Porque ha dejado un mensaje para Junts, destacando que lo que depende del Gobierno "se está cumpliendo" y que trabajan para que lo que depende de otros "se cumpla".
Así ha llegado el acuerdo entre España y Alemania. Así, mientras en Moncloa trasladan tranquilidad y en que nada ha cambiado en su relación con Junts. Que ya sabían de la importante reunión que iban a tener y que lo que de ellos depende avanza a buen ritmo.
Está por ver si eso es suficiente para Junts. Para una formación que se reúne en Perpiñán, en Francia, después de "la hora del cambio" de la que hablaron en el Congreso de los Diputados. Según el grupo, se celebra "de acuerdo con el calendario previsto".
Entre las opciones posibles, una consulta a la militancia. Ya han acudido a la misma varias veces, por el acuerdo para hacer presidente del Gobierno a Pedro Sánchez en 2023 o si salían del Govern de Pere Aragonés.
Ya han ido dejando caer la opción de que puedan pasar cosas. De que se daban de margen hasta mediados de diciembre para tomar una decisión sobre su apoyo al Gobierno por lo que consideran numerosos "incumplimientos". "Ya dijimos a Sánchez que esa prórroga no duraría toda la legislatura", recuerda Nogueras.