Para Jaume Asens, abogado de los condenados por el asedio al Parlament, piensa que se ha usado a los ocho condenados como "chivos expiatorios". Para él, "es una sentencia ideológica y que obedece a las razones de Estado".

El Tribunal Supremo considera que utilizaron la violencia, la intimidación y amenazas graves. Sin embargo, ellos consideran que lo único que hicieron fue seguir al diputado López de Tena criticando sus políticas de gasto y diciéndole que no les representaba.

Otro de los que entrará en prisión lo hará por pintarle la chaqueta a una diputada. La polémica se ha trasladado hasta el pleno, donde la CUP ha abandonado la sesión como protesta.

Sin embargo, para el Govern solamente se está aplicando la ley, porque para Ramón Espadaler, secretario general de CIU, "hay que poner los límites cuando se sobrepasan los derechos como en este caso".