En una entrevista en la emisora francófona Equinox, con sede en Barcelona, y preguntado sobre cuántos votos serían necesarios para proclamar la independencia, tras la celebración de un referéndum, el presidente catalán ha asegurado: "En todos los casos del mundo es la mitad más un voto de los votos de la participación, por supuesto".
Preguntado también sobre cuál sería la participación mínima para que el resultado del referéndum fuera válido, Puigdemont ha indicado que "habrá que ver, porque hay diferentes experiencias", pero ha avisado de que "no se puede privilegiar la opción de los boicoteadores sobre la opción de las personas que quieran participar".
"Esperamos que la validez de los resultados venga de los ciudadanos, no de los tribunales; es decir, que si hay una participación clara, un mandato claro, no habrá ninguna duda sobre su validez", ha advertido Puigdemont.
"Nuestra finalidad como gobernantes es ofrecer un referéndum en el que todos los ciudadanos puedan participar, con la información y los datos sobre lo que se va a votar y sobre cuáles son las consecuencias del 'sí' y del 'no' y de facilitar la votación", ha agregado al respecto.
"Por supuesto -ha continuado- habrá una parte de la población que no querrá, libremente, participar; y si hacemos caso de lo que dicen los partidos unionistas, una parte de los unionistas van a boicotear el referéndum, y habrá una parte que hará campaña activa por el 'sí' y otra que hará campaña activa por el 'no'".
Después, ha indicado, "vamos a esperar los resultados y vamos a decidir si a partir de todos esos elementos los resultados son válidos para todos, y sobre todo para la comunidad internacional, para conocer la voluntad mayoritaria de los catalanes".
"Y sin ninguna duda -ha agregado-, si se conoce la voluntad mayoritaria de los catalanes, nuestro deber como gobierno y como Parlamento será la de proclamar la independencia si gana el 'sí' o de renunciar a la independencia si gana el 'no'".
Más allá de la respuesta del Estado, Puigdemont ha insistido en que la consulta se celebrará porque "hay un enorme consenso en Cataluña, de forma completamente transversal, incluso entre los partidarios del 'no' a la independencia, para aceptar el referéndum como un instrumento para resolver esta cuestión".