La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha subido esta semana, más que nunca, al carro de la ultraderecha por sus comentarios xenófobos sobre la migración. La dirigente ha lanzado declaraciones muy peligrosas vinculando a los migrantes acogidos en Alcalá de Henares con delincuencia, enfermedades y agresiones sexuales. Sin embargo, hace poco reprochaba a Vox opiniones idénticas a las que ha lanzado ella esta semana.

Ayuso ha sostenido este miércoles que la llegada de 1.200 migrantes a Alcalá de Henares ha traído "varias reyertas graves" en el centro de acogida, "un brote de sarna que ha obligado a tratar a ocho personas para que no se extienda" y "denuncias por agresiones sexuales" a mujeres del municipio. La dirigente ha ido con estas afirmaciones más allá en su constante batalla contra el Gobierno de Pedro Sánchez, puesto que no ha aportado datos que lo demuestran. De hecho, este jueves ha reconocido que un "juez es quien tiene que determinar" si los responsables de lo que denuncia son de "fuera" o vecinos del municipio.

Hace escasos meses, en noviembre de 2023, Ayuso le espetaba esto a la portavoz de Vox en la Asamblea, Rocío Monasterio: "Si han nacido aquí son tan españoles como Santiago Abascal". También en un encontronazo con Vox, en febrero de 2022, Ayuso aseguró que "la delincuencia no está relacionada con el origen de las personas". "Que no vuelvan a mezclarlo", le advertía a la ultraderecha. Por esas mismas fechas, decía que "lo que no se puede es criminalizar a la inmigración". "No se puede señalar a un inmigrante por si es o no criminal y si lo es, es por el origen", explicaba Ayuso hace poco. Ahora es ella la que ha recalcado el discurso de Vox que tanto ha criticado.

"Son niños"

En noviembre de 2019, Ayuso defendía a los menores extranjeros no acompañados de los ataques de Vox, remarcando que "son niños con una serie de trabajo y de cuidado forman parte" de la sociedad "sin ningún problema". "La inmensa mayoría no tiene ninguna relación con la delincuencia y la inmensa mayoría cuando se les dan oportunidades se integran porque son sobre todo menores", argumentaba sobre las críticas al centro de primera acogida de Hortaleza de la formación ultraderechista.

No solo eso, sino que la presidenta madrileña en un pleno del 5 de diciembre de 2019 en la Asamblea de Madrid afeó a Vox que ponga "en tela de juicio si pesa más o menos un acto incívico según el origen de la persona que lo comete". Incluso, les llegó a preguntar "dónde quedaba la moral cristiana" de este partido.

Díaz Ayuso cuestión que Vox considere que un acto incívico "es más o menos aceptable" dependiendo "de dónde uno proceda", y denostó la noción de que "si es españolazo, si es de los nuestros, la conducta incívica está bien vista", porque para ella "todas las conductas incívicas son condenables". "Aquí lo importante es la situación de los trabajadores y también, aunque no les guste, la situación de estos menores no acompañados que son ante todo -no sé donde queda su moral cristina-, menores. Son menores, es infancia", recalcaba.