Viajar en eventos
¿Se puede visitar el Vaticano (y Roma) durante el Cónclave? Sí, pero...
¿Quién no ha pensado alguna vez viajar a algún lugar en el que se desarrolle un evento histórico? Un cónclave es algo tan relativamente poco frecuente que es llamativo para el turismo.

Viajar en momentos históricos es algo que muchos quieren vivir. La 'suerte' es la principal aliada a la hora de coincidir con acontecimientos como fallecimientos de personalidades importantes, pero en lo que se refiere a eventos previstos, todo cambia. Es por eso que si bien a algunos les pilló de casualidad en Roma cuando el papa Francisco fallecía, el 21 de abril, no lo fue tanto para todos los que decidieron viajar a Italia para el funeral del pontífice. Y tampoco lo será para los que opten por visitar la capital de Italia y aprovechar para pasarse por la pequeña Ciudad del Vaticano con el fin de ver cómo se desarrolla el cónclave del que saldrá elegido el próximo papa.
¿Pero se puede visitar el Vaticano durante este periodo de tiempo? Técnicamente sí, se puede visitar Ciudad del Vaticano durante el cónclave. Pero hay que tener algunos aspectos en cuenta. Si bien los Museos Vaticanos siguen disponibles para visitas turísticas durante estos días, las entradas online están agotadas desde hace tiempo. Es cierto que es habitual que con poca antelación las entradas estén agotadas, pero en este caso, era de prever que ocurriera.
En cualquier caso, incluso con entrada, la Capilla Sixtina permanece cerrada, como es obvio, teniendo en cuenta que es el lugar en el que se encierran bajo llave los cardenales para votar al sucesor de Francisco. No sólo esta semana: la Capilla Sixtina se cerró el pasado lunes 28 de abril, una semana después de la muerte del pontífice, con el fin de comenzar los exhaustivos preparativos de seguridad de cara al cónclave. Pero no sólo la Capilla Sixtina: las visitas a los Jardines Vaticanos y a la Necrópolis de la Vía Triumphalis también quedan suspendidas hasta que finalice el cónclave.
Los precios en Roma, por las nubes
Otro de los aspectos a tener en cuenta a la hora de viajar a Roma durante el cónclave es el de la previsible aglomeración de turismo. El mercado hotelero de la capital italiana alcanzó su punto máximo el 25 de abril, la víspera del funeral del papa, según datos publicados por CoStar. La ocupación hotelera de aquella jornada fue de casi el 89%, con una tarifa media diaria de más de 350 euros.
Tanto es así, que la Federación Empresarial de Asociaciones Territoriales de Agencias de Viajes Españolas (FETAVE) tuvo que advertir previamente que ni los hoteles de Roma ni el aeropuerto de Fuimicino tenían capacidad suficiente para hacer frente al récord histórico de viajeros que optaron por acudir al entierro de Francisco. Además de la saturación del aeropuerto, desde FETAVE también alertaron del encarecimiento de los precios de los hoteles, precios ya elevados, al estar en año jubilar.
El 90% de los alojamientos disponibles en la plataforma Booking estaban ocupados para el fin de semana del funeral con días de antelación, con tarifas entre un 30% y un 75% superiores a las tarifas habituales. Algo similar ha ocurrido en las tarifas de los billetes de avión. Todo esto quizás desanima a algunos, aunque los más previsores puede que ya tengan todo preparado para volar a la capital de Italia con el fin de cruzar la pequeña frontera que separa al país transalpino del pequeño estado vaticano.