Tras una temporada de más a menos, sobre todo después de ganar Wimbledon ante Novak Djokovic, Carlos Alcaraz está pagando la cuenta del esfuerzo mayúsculo realizado este 2023.

Probablemente, en su debut en el Masters 1.000 de París, el murciano tocó fondo después de perder ante el ruso Roman Safiullin.

Esta derrota, en la que acabó "decepcionado con el nivel", queriendo "dar más en la pista", pero sucumbiendo ante "muchas cosas que mejorar" en su juego, deja a Alcaraz sin opciones de luchar por su objetivo: terminar 2023 como número 1 del mundo.

"Después de esta derrota no tengo opciones, todas las que tenía para acabar número 1 al final del año se han ido. No vamos a pensar eso, creo que oportunidades hay cero", señaló tras la derrota.

"Mi tenis precisa de un nivel físico alto, pero de movilidad, de rapidez, me ha faltado mucho. Me he sentido lento", añadió.

En la mira quedan las ATP Finals en Turín, donde se verá las caras con los otros siete mejores tenistas del año. ¿Llegará al 100%? Ni el mismo lo sabe.

"Quedan muchos días de entrenamiento para llegar al nivel que quiero, no obstante ahora no tengo el ánimo para hablar de eso. Tras esta derrota tengo que tomar algo de distancia antes de hablar del futuro y de lo que tengo que hacer", zanjó.