Marc Márquez ha viajado hasta Misano para pasar un reconocimiento médico y recibir la autorización para participar en los tests que tendrán lugar martes y miércoles en el trazado italiano. La vuelta del '93', aunque de momento no sea oficial al 100%, ha provocado la alegría de sus mecánicos.

El seis veces campeón del mundo de MotoGP viajó el viernes por la noche al circuito y en los terceros entrenamientos libres se dejó ver por el box de su equipo, en el que fue recibido con alegría y entre risas, en una vuelta que es una luz al final del túnel para Honda, que está viviendo la peor temporada de su historia en MotoGP. Y él, ya está en dinámica de equipo participando activamente dentro del box ayudando a sus mecánicos y dando consejos a su hermano Álex.

Todavía tienen que esperar al examen médico que se le realizará tras la clasificación de todas las categorías, pero la presencia de Márquez es ilusionante, porque por primera vez en tres meses ha vuelto con posibilidades de competir, algo que no sucedió cuando fue al Gran Premio de Austria, donde todavía no tenía el apto para entrenar en moto.