Brian Brobbey, futbolista del Ajax, celebró uno de los goles de este fin de semana ante el Utrecht e inmediatamente después recibió insultos racistas por parte de los aficionados más radicales del equipo local. Algo que ha indignado a Países Bajos y a la Eredivisie.

Brobbey reaccionó tras el encuentro, asegurando que no se había enterado de nada en el momento: "Mi hermano me dijo que se hicieron ruidos de mono. No me podría importar menos, no me conmueve. Déjalos hablar, al final del día ganamos nosotros y ellos perdieron".

El Utrecht ya ha anunciado que los radicales están localizados: "Tenemos a las personas que han gritado en la imagen. Iremos tras eso. Puede que sean números pequeños, pero la cagan".

La liga de fútbol de Países Bajos, por su parte, condenó los hechos a través de un comunicado oficial: "La fiscalía del fútbol profesional está investigando si se puede culpar al club".

"Anteriormente, los perpetradores de cánticos discriminatorios quedaban en libertad con demasiada frecuencia porque las imágenes disponibles en combinación con el sonido no eran pruebas suficientes. Esperemos que eso no vuelva a suceder en el futuro", sentencia la nota.

Brobbey ha recibido el cariño de compañeros y rivales después de esta lamentable situación que tuvo que vivir en un partido de fútbol.