Un gol de Raúl García, precedido de una impresionante 'delicatessen' de Aritz Aduriz dentro del área visitante, devolvió este domingo al Athletic Club a una pelea europea en la que se queda a tiro hasta de los puestos de Champions, que sigue marcando el Villarreal a pesar de su derrota por la mínima en San Mamés (1-0). Raúl recogió el rechace de Sergio Asenjo, que le dejó el balón en los pies, y marcó a puerta vacía para premiar una segunda mitad espléndida rojiblanca.
Arrancó mejor el Athletic, tratando de encajonar en su campo al Villarreal, pero no les duró mucho la iniciativa a los de Valverde ya que los de Escribá poco a poco fueron neutralizando el ímpetu local y equilibraron el juego. Aunque no pasaron de ahí los visitantes, que parecieron contentos con el 0-0 ante un rival incapaz de poco más que de apretar la posesión amarilla y enviar algún que otro centro colgado al área. Eso sí, sin demasiado peligro. Tampoco el Villarreal se acercaba con peligro al área rojiblanca.
Si acaso durante unos minutos rondando la media hora con un pase atrás de Bruno hacia Samu Castillejo, que cortó Balenziaga a córner. También en córner acabó una disputa aérea entre Williams y Jaume Costa a un centro desde la izquierda con cierta intención. Prueba de lo árida que resultó la primera mitad fue que acabaron inéditos tanto los dos porteros, Kepa y Asenjo, como los dos delanteros centro, Aduriz y Sansone. Bueno Sansone si apareció, si bien para ver una tarjeta amarilla más que merecida por una entrada por detrás a Muniain con la que paró una contra bilbaína.
El Athletic superó al Villarreal tras el descanso
Se animó, como casi era imposible que no sucediese, el choque en la segunda mitad y la espoleta fue la primera de las muchas apariciones que tuvo Williams en la reanudación. En esa primera acción centró sobre Muniain, que cruzó demasiado el remate al recibir el balón demasiado encima. Respondió Samu Castillejo con un disparo desde la frontal a las manos de Kepa, pero el partido ya era más del Athletic. Y sobre todo de Williams, que no paró de percutir por la derecha.
Hasta tres ocasiones generó el veloz extremo bilbaíno. En la primera, la más clara, mandó el balón al palo tras regatear a Asenjo en un mano a mano en el que le dejaron un pase de Raúl García y un extraño escorzo de Jaume Costa; en la segunda no acabo de controlar el balón en una veloz diagonal hasta el área y en la tercera su centro se fue a córner. Pero no fue Williams, sino Raúl García en que derribó el muro amarillo. Fue, eso sí, tras una 'delicatessen' de Aduriz.
El ariete internacional bajó un balón del cielo con un impresionante control orientado que le permitió rematar con opciones hacia la meta de Asenjo. El meta palentino rechazó como pudo y a los pies de Raúl, que no tuvo más que empujar para abrir el marcador. A partir de ahí el encuentro fue un duelo ente Aduriz y Asenjo, del que salió vencedor el portero, que respondió con tres grandes paradones a otros tantos espléndidos remates del delantero. Aún tuvo otra Aduriz, pero, quizás harto de encontrar a Asenjo entre los tres palos, el disparo le salió alto.
Bakambu tuvo el 1-1
También tuvo un par de opciones el Villarreal, pero Bakambu no fue capaz de encontrar un balón suelto que le cayó en el área para el 1-1 y a Pato le detuvo con solvencia Kepa un fuerte disparo desde la frontal tras jugada individual.