Bernardo Silva fue uno de los lanzadores del Manchester City que marró su penalti en la ronda de cuartos de final de Champions ante el Real Madrid. El portugués, uno de los jugadores más destacados de su equipo, tomó una decisión en su disparo que Lunin adivinó... y que salió mal.

Porque el luso trató de batir al ucraniano por el medio. Pensó él que, posiblemente, se moviera o bien a derecha o bien a izquierda. Pero no, no se movió un centímetro y no tuvo problema alguno en detener su lanzamiento.

Ahora, después de la ronda que enfrentó a los de Guardiola frente al Chelsea, Silva ha explicado qué sucedió y qué le llevó a tomar esa decisión de ponerla en el centro, y a media altura.

Para asegurar, debió pensar a buen seguro. Pero no, al final lo único seguro fue que el disparo terminó en las manos de Lunin.

"El 99%..."

Así habla de todo el portugués: "Había dos opciones, que era o lanzarlo a los lados o al medio. Estaba esperando... y Lunin se movió rápido".

"Pensé que la mejor opción era al medio. En esos momentos de presión los porteros se mueven el 99% de las veces", afirmó.

Lamentablemente para él, Lunin era del 1% restante. El Real Madrid, tras la tanda de penaltis, se clasificó para las semifinales de Champions. Su rival, el Bayern de Múnich.