Vergonzoso, lamentable, salvaje... falta adjetivos para calificar la agresión que se vivió en el partido entre Esporte Clube Guarani y Sport Club São Paulo de la Serie A2 (segunda división) del Campeonato Gaúcho.
Corría el minuto 15 de la segunda mitad cuando William Ribeiro fue amonestado con tarjeta amarilla por el árbitro Rodrigo Crivellaro Dias. Tras mostrarle la cartulina, el futbolista se lanzó a por el colegiado, le empujó, le tiró al suelo y, una vez en el piso, pateó con brutalidad su cabeza.
Los jugadores tuvieron que detenerle y una ambulancia entró en el campo para trasladarle de urgencia al Hospital São Sebastião Mártir.
Ribeiro, por su parte, fue arrestado por la policía con cargos de tentativa de homicidio y aún permanece en dependencias policiales.
Luciano Hocsman, presidente de la la Serie 2, ha confirmado que el árbitro está bien: "Hablé con el árbitro Rodrigo Crivellaro, cobardemente atacado por un jugador paulista, en el partido contra Guaraní. Está siendo medicado en el Hospital y se está recuperando felizmente. El FGF está brindando todos los cuidados necesarios y será el Tribunal quien evalúe el episodio".